Corralito, o cómo tu dinero es menos tuyo

Con la implantación de la limitación de disposición de capitales en Grecia, el concepto coloquialmente llamado corralito vuelve a estar de actualidad, como lo estuvo anteriormente con los casos de Argentina o Chipre. Pero realmente hay que preguntarse: ¿cuáles son las implicaciones para los habitantes de esos países? Y más concretamente: ¿cuáles son las implicaciones para sus ahorros?

¿Qué es un corralito? 

Es una medida política que pretende evitar la salida masiva de depósitos en los bancos. Por tanto, intenta evitar la insolvencia que supondría para cualquier sistema bancario que un gran número de ahorradores quieran retirar de golpe todos sus ahorros. Es obvio que los bancos sólo tienen disponible una parte limitada de los fondos, puesto que en un funcionamiento normal, los ingresos y las retiradas de forma global se compensan y permiten operar ordinariamente.

Sin embargo, en situaciones de pánico la gente tiene miedo a perder su dinero y en consecuencia, todos quieren retirarlo de forma simultánea y precipitada.

Antecedentes 

El caso más famoso y que da lugar al nombre es el caso de Argentina en 2001. Duró exactamente un año, de diciembre de 2001 a diciembre de 2002. En su caso, el límite fue de 250 dólares semanales y posteriormente derivó en el llamado corralazo, ya que la limitación de disposición resultó finalmente una quita asociada a la devaluación de la moneda.

Un ejemplo más próximo en el tiempo, en las causas e incluso en la geografía, es el de Chipre en 2013. En su caso, el límite era de 300 euros y se produjo después de un acuerdo con el Eurogrupo, por el que el país recibía 10.000 millones de euros y se hacía nuevamente una quita sobre una parte de los depósitos. Finalmente se decidió respetar los depósitos de menos de 100.000 euros, pero los que superaban este importe sufrieron una quita del 47,5%.

¿Qué efectos tiene sobre la economía? 

La limitación del dinero en circulación y el origen de esa problemática, que es la incertidumbre y el miedo, genera que la actividad económica se derrumbe y el país entre en una situación de letargo financiero y económico, muy perjudicial para su crecimiento. Además, provoca un incremento de precios enorme ante la posible escasez de oferta, que deriva en un incremento de la inflación.

Efectos sobre los ahorradores e inversores 

Cuando se llega a una situación de limitación de disposición de depósitos realmente nos encontramos ante una insolvencia de facto de la banca, y tiene diversos efectos sobre los ahorradores:

  • El más evidente es la no disponibilidad del dinero. Por tanto, nuestro dinero en cierta forma deja de ser nuestro, al no poder disponer de él libremente.
  • Seguramente lo más temido por los ahorradores son las quitas, que como hemos visto, suelen suceder al corralito en muchos casos, bien por liquidación de los bancos dada su insolvencia o bien por la devaluación de la moneda. En el caso griego, éstas vendrían por un hipotético abandono del euro y la conversión de los depósitos a la nueva moneda.

Conclusión

La decisión de adoptar un corralito es siempre el último recurso de un gobierno para una situación muy comprometida de su banca, y por tanto, para los ahorradores es siempre una mala noticia. Los más previsores o con más recursos probablemente ya habrían retirado sus capitales del país con mucha antelación.

Si sólo fuera una crisis de liquidez temporal, seguramente a muchos ahorradores no les supondría un gran problema puesto que pueden esperar, pero lo realmente dramático es que suele ser el preludio de una quita, que sí supone un enorme problema para los ahorradores puesto que pueden perder una parte significativa de su poder adquisitivo.