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Analiza una empresa rápidamente con ratios

El análisis fundamental nos permite entender el negocio de una compañía. Cuando somos accionistas a largo plazo de una empresa nuestra rentabilidad va de la mano de la evolución del negocio. Si la empresa crece, vende cada vez más y gana cada vez más dinero, es muy probable que las acciones se revaloricen y ganemos dinero como accionistas, tanto por el mayor reparto de dividendos, como por la revalorización del precio de sus acciones.

¿En qué nos debemos fijar para entender mejor si un negocio prospera?

Hay una serie de aspectos que se reflejan en las cuentas de una empresa y que nos indican la salud de un negocio: es importante para comprender la situación actual de la empresa y la evolución que mantiene a lo largo del tiempo.

Una ratio es una variable dividida por otra. Es una forma de relacionar dos aspectos que nos interesa observar en las cuentas financieras de una empresa. Veamos un ejemplo muy sencillo para entender bien a qué nos referimos cuando hablamos de ratios:

Un ejemplo de ratio: margen neto

En la cuenta de pérdidas y ganancias de cualquier empresa nos encontraremos al inicio de todo la cifra de negocios, es decir, las ventas que ha realizado (en euros). Al final de la cuenta de pérdidas y ganancias veremos el beneficio neto que ha ganado la empresa, igualmente expresada en euros. Si dividimos este beneficio neto por la cantidad total de ventas obtendremos una ratio llamado margen neto de beneficio de la empresa. Este margen neto estará expresado como un porcentaje y nos indicará la cantidad de beneficio neto que obtiene la empresa con respecto a sus ventas. Si por ejemplo el margen neto es de un 12%, significa que por cada 100 euro de ventas que ha obtenido la empresa ha logrado generar 12 euros de beneficios.

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Cuatro categorías de ratios financieros

A grandes rasgos, hay cuatro categorías de ratios financieros que nos resultan útiles para observar y comprender la salud de un negocio y su posible atractivo como inversión:

  • Ratios de rentabilidad.
  • Ratios de liquidez.
  • Ratios de solvencia.
  • Ratios de valoración.

Ratios de rentabilidad

La rentabilidad es un aspecto clave de cualquier negocio. Aquellos negocios que ganen dinero conseguirán sobrevivir y prosperar. Es importante señalar que unas abundantes ventas o una cifra de negocios creciente no necesariamente es sinónimo de ganar dinero. El análisis de la rentabilidad de una empresa analiza cuántos beneficios es capaz de generar una empresa con respecto a sus ventas generadas en ese ejercicio..

Además, no sólo es importante observar la cantidad de beneficios que genera una empresa con respecto a sus ventas, sino también cuántos activos necesita para generar estas ventas. A igualdad de condiciones una empresa que es capaz de generar el mismo beneficio que otra con menos activos en el balance, es mejor negocio.

Las principales ratios de rentabilidad son:

  • Margen bruto.
  • Margen operativo.
  • Margen neto.
  • Margen de flujos operativos.
  • Retorno sobre activos.
  • Retorno sobre patrimonio.
  • Retorno sobre capital invertido.

Todas estas ratios tienen en común que observan la cantidad de beneficio generado con respecto a otra magnitud de las cuentas financieras de la empresa.

Ratios de liquidez

En contabilidad financiera la liquidez suele hacer referencia a cómo de rápido puede una empresa cumplir con sus deudas. Por ejemplo, si una empresa dispone de más activos corrientes que de pasivos corrientes. En este sentido la liquidez nos da una idea de cómo de eficiente es la empresa desde el punto de vista operativo.

Algunas de las principales ratios de liquidez son:

  • Current Ratio.
  • Quick Ratio.
  • Ratio de efectivo.

Ratios de solvencia

A la hora de invertir no sólo debemos pensar en encontrar empresas que puedan ganar dinero. Igual de importante es evitar empresas que vayan a quebrar. Para ello es necesario tener en cuenta la solvencia de una empresa. A partir del momento en que una empresa utiliza deuda para financiar sus actividades hay que considerar que esa deuda se tiene que ir pagando periódicamente y, por tanto, el negocio debería generar el suficiente dinero como para atender esos pagos.

Las ratios de solvencia nos indican la capacidad que tiene la empresa para cumplir con sus pagos de deuda y, por tanto, nos sirven para calcular su riesgo como inversión.

Las principales ratios de solvencia son:

  • Ratio de apalancamiento.
  • Fondo de maniobra.
  • Situación neta.
  • Ratio de solvencia.

Ratios de valoración

Las ratios de valoración son, sin duda, las más conocidas por la mayoría de inversores. Ratios como el PER son utilizadas frecuentemente para calibrar si la acción de una empresa está cara o barata de una forma rápida.

Con las ratios de valoración contrastamos el precio que pagamos por un activo frente a otra característica de la empresa. En el ejemplo del PER lo que observamos es cuánto beneficio genera la empresa con respecto al precio que pagamos por la acción.

Las principales ratios de valoración son:

  • PER.
  • Precio a valor contable.
  • Precio con respecto a ventas.
  • Precio con respecto a flujo de caja.

Ratio financiero: el primer paso en la toma de decisiones

Todas estas ratios nos pueden ayudar a tener una idea rápida de la realidad económica de cualquier empresa. El uso de ratios no debe eliminar el análisis más profundo posterior, pero nos puede dar indicaciones de qué aspectos pueden ser problemáticos y cuáles son los puntos fuertes del negocio de la empresa en que la estamos considerando invertir.

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