Seguro que el término banco sistémico, pese a no ser muy cotidiano, empieza a sonarnos por las noticias relacionadas con la exigente regulación a la que se somete al sector bancario y las noticias que se derivan de ello.
¿Qué es un Banco Sistémico?
Un banco sistémico es aquel que por su importancia, tamaño o influencia tiene una gran relevancia en el mercado en el que opera. Por ese papel principal tienen una importancia capital en la estabilidad de las economías en las que desarrollan su actividad y, por tanto, por el bien común, se considera que “no se les debe dejar caer”, lo que en inglés conocemos con las siglas TBTF (Too Big to Fail).
Todo el desarrollo normativo al respecto se gestó tras la caída de Lehman Brothers el 15 de septiembre de 2008. A raíz de ese hecho, los reguladores y estados se pusieron manos a la obra para evitar que algo similar volviera a suceder en el futuro.
Bancos sistémicos mundiales
Inicialmente son el Consejo de Estabilidad Financiera (FSB en inglés), junto al famoso Comité de Basilea (que desarrolla otras famosas normativas de capital para la banca) los encargados de coordinar y gestionar todo el proceso. En 2013 establecieron una lista de 29 entidades que se consideran sistémicas a nivel mundial, con tres categorías de requerimientos en función de su importancia. En esa lista global tenemos solo una entidad española, el Banco Santander. Hasta el 2 de noviembre de 2015, BBVA también tenía dicha consideración.
Bancos Sistémicos Europeos
Además, el Banco Central Europeo (BCE), en su nuevo papel de supervisor bancario que asume las competencias de los bancos centrales de cada país para ejercer su labor, ha hecho su propia clasificación de bancos sistémicos por países. En España el BCE anunció en 2014 la lista de 15 entidades que consideraba sistémicas: BBVA, Santander, Banco de Sabadell, Bankia, Banco Mare Nostrum, Banco Popular Español y Bankinter, así como Ibercaja, La Caixa, Banco de Crédito Social Corporativo, Catalunya Banc, Kutxabank, Liberbank, Unicaja y Banesco Holding Hispania.
A nivel Europeo, el total de entidades son 120, siendo Alemania el país con más bancos sujetos a su supervisión: 21.
Requisitos para las entidades
En general, a todas las entidades se les exigen requisitos adicionales de solvencia, control, comunicación, supervisión, etc. Lo que se pretende es que las entidades no necesiten de ayuda pública para soportar una crisis en el futuro, en primer lugar porque tengan más colchones de seguridad, y en segundo porque hayan desarrollado mecanismos de resolución propios (con quitas para los tenedores de deuda y acciones, es decir, inversores privados).