En España ya se ha aprobado la “hoja de ruta del hidrógeno: una apuesta por el hidrógeno renovable”, un plan para desplegar este vector energético sostenible y que será clave para alcanzar la neutralidad climática en 2050.
Hidrógeno verde: el camino hacia una industria rentable
Se espera que el hidrógeno renovable incentive la creación de cadenas de valor, el conocimiento tecnológico y la generación de empleo, según las previsiones del Gobierno. Todo ello debería contribuir a la creación de una economía verde de alto valor añadido.
Para impulsar este plan, hasta 2023 se destinarán 1.555 millones de euros, procedentes de los Fondos de Recuperación de la UE. Y es que cumplir el objetivo de las cero emisiones en 2050 requiere una fuerte inversión para que pueda ser comercialmente rentable lo antes posible.
Los expertos señalan que este objetivo pasa por el hidrógeno sostenible y esperan que muy pronto sea el combustible del transporte, que se consiga utilizarlo como sistema de almacenamiento de energía renovable o, que llegue a sustituir al gas natural en los hogares.
2030 y 2050: dos horizontes para el hidrógeno verde
Un inciso, conviene recordar que el hidrógeno verde es el que se produce mediante electrólisis del agua, usando electricidad procedente de fuentes renovables (fotovoltaica o eólica).
El Gobierno español ha situado como objetivo en 2030 haya al menos 150 autobuses, 5.000 vehículos ligeros y dos líneas ferroviarias comerciales impulsadas por hidrógeno verde, más 100 estaciones de hidrógeno verde. Mientras, la CE estima que en 2050 el hidrógeno supondrá entre un 12% y un 14% del mix energético total, frente al 2% actual.
España como potencia generadora de hidrógeno verde
Según la consultora Aurora Energy Research, España y Noruega serían las mejores zonas para producir hidrógeno verde en Europa por su capacidad para generar energía eólica. Esto reduciría el coste de la propia energía eólica y mejoraría la utilización y economía de un electrolizador.
Sin embargo, en España, hoy no se produce hidrógeno verde, porque no se vendería al ser su producción más cara que el hidrógeno gris (el que genera CO2).
La Asociación Española del Hidrógeno (AeH2) indica que, en Europa, Alemania es el líder en hidrógeno verde. En América, sobresalen Chile y Canadá; mientras que en Asia destacan Corea del Sur, Japón y China.
Las estimaciones más optimistas calculan que se podría producir hidrógeno verde por menos de 2,5 euros/kg en 2030. La IEA (Agencia Internacional de la Energía) calcula que un kilogramo de hidrógeno verde tiene un coste de entre 3,5 y 5 euros, que equivale a 0,10 y 0,15 euros/kWh. Como referencia, el hidrógeno gris (gas natural) en 2021 cuesta unos 0,045 euros/kWh (1,5 euros/kg).
Cómo invertir en hidrógeno verde
Según este artículo publicado en El Economista existen varios ETF en EE.UU. especializados en el hidrógeno verde, aunque solo dos de ellos, el L&G Hydrogen Economy y el VanEck Vectors Hydrogen Ecoy, tienen una clase UCITS disponible en Europa.
Y entre los fondos de inversión tradicionales apuntan el Kiwoorn Global Hydrogen VISION, Nikko Global Hydrogen Equity Fund, o PMG Ind. Fd. Sol. Hydrogen&Batt Pow, si bien ninguno está disponible en España.
Otra alternativa es invertir en alguna de las empresas del índice Solactive Global Hydrogen entre las que se cuentan Orsted, Engie o Iberdrola.
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