Aunque parezca el milagro de los panes y los peces, podemos tener más renta disponible teniendo el mismo sueldo y sin que nuestra empresa pague más por nosotros.
¿Dónde está el truco?
La flexibilidad retributiva consiste en la posibilidad de percibir una parte de tu nómina en productos y servicios, en lugar de cash. El objetivo último es que esos productos y servicios tengan una ventaja fiscal, por lo que teniendo el mismo sueldo bruto al final tu sueldo neto se incrementa:
- Sigues cotizando a la Seguridad Social por la totalidad de tus retribuciones (ya sea en dinero o en especie).
- Pagas menos impuestos porque los productos y servicios en especie están exentos.
- Al pagar menos impuestos, con el mismo salario tendrás más renta disponible.
El ahorro de los productos contratados dependerá de tu nivel de salario, pero para los salarios más elevados puede llegar al 40%. Dichos importes se restan del salario bruto, por lo que “nos ahorramos” las retenciones de IRPF.
Veamos con un ejemplo numérico cómo nos puede beneficiar esta posibilidad en el incremento del salario neto:
Pensemos en un empleado que cobre 2.500 € brutos mensuales, que tenga retenciones de IRPF del 25%, y un 6% de cotización a desempleo y Seguridad Social.
Pongamos que en ese importe están incluidos 500 € al mes en salario flexible entre tickets restaurante, transporte y otros conceptos.
Esos 500 € al mes sí cotizan a la Seguridad Social, pero no en IRPF. Por tanto, a la Seguridad Social le seguirá pagando sobre 2.500 €, pero en IRPF pagará sólo sobre 2.000 €.
Es decir, si cobrara todo en efectivo le retendrían por IRPF 625€ mensuales (2.500 € x 25%), pero en cambio, con esta nueva fórmula de pago en especie con beneficio fiscal pagaría 500€ (2.000 € x 25%).
Por tanto, cobraría 125 € más al mes. Es decir, el trabajador del ejemplo ha incrementado su salario neto un 7,2% sin que la empresa tenga un sobrecoste por ello. Por tanto, es lo que se suele llamar un “win-win”.
Conceptos que se pueden incluir
Ticket restaurante
- Que los pagos con los tickets restaurante sean efectuados por el empleado durante los días efectivos de trabajo y en los que no se devenguen dietas por manutención.
- Sólo podrán incluirse los días laborables con jornada completa.
- El importe máximo por día no acumulable es de 9 euros.
Tarjeta Transporte
No se considera retribución en especie y por tanto queda exento de tributación el gasto en transporte, cuyo objetivo es acudir al centro de trabajo en transporte público y colectivo, con los siguientes requisitos:
- La cantidad máxima mensual es de 136,36 euros mensuales por trabajador, con el límite de 1.500 euros anuales.
- Puede utilizarse para la compra de títulos de transporte colectivo (metro, bus, tren, AVE…).
Formación
La formación no se considera retribución en especie siempre y cuando venga exigida por el desarrollo de las actividades profesionales o las características del puesto de trabajo. Por ejemplo, si el curso o máster que decidas realizar cumple con lo estipulado en la normativa, su importe no tendrá imputación fiscal. El descuento en la nómina puede pactarse con RRHH para que no sea todo de golpe.
Guardería
El importe que destines al pago de la guardería de tus hijos no se considera retribución en especie y por tanto está exento de IRPF. Seguramente éste sea uno de los importes más elevados que pueden generar un ahorro relevante.
Seguro médico propio y de familiares
Se consideran retribución en especie no sujeta a tributación fiscal los seguros de enfermedad pagados por la empresa a entidades aseguradoras para la cobertura de enfermedad de sus empleados, cónyuge (casado legalmente) y descendientes, con el límite de hasta 500€ anuales por cada asegurado.
Gestión
El mayor inconveniente a nivel de la empresa es la propia logística y gestión, ya que requiere tener un sistema de registro y de control de todos estos beneficios sociales. Y además, cada mes hay que volcarlo en la nómina de los trabajadores.
Por ello, las empresas que suelen ofrecer estas ventajas suelen ser o bien organizaciones relativamente pequeñas que permitan que la operativa no se convierta en un caos de gestión, o por el contrario organizaciones grandes que tienen unos sistemas de información que permiten automatizar todo el proceso, de forma que no se requiera una actuación administrativa extraordinaria.