Aunque quedan varios días, anticipate al Black Friday, que este año se celebra el 29 de noviembre, no es pronto para tratar el tema del viernes con descuentos en casi todas las tiendas y comercios. Anticiparse al Black Friday es fundamental para detectar los verdaderos chollos.
En las últimas semanas de octubre, diferentes empresas y marcas ya empezaban a calentar esta fecha anunciando algunas ofertas que tendrán ese día y durante ese fin de semana de descuentos hasta el Cyber Monday. De hecho, algunos comercios se adelantan y tiran la casa por la ventana durante el mes de noviembre con pequeños aperitivos para el Black Friday, en forma de descuentos semanales en determinados productos.
Así lo hace, por ejemplo, Amazon que en noviembre tiene numerosas ofertas en multitud de secciones. O Aliexpress. Porque en China no celebran el Viernes Negro -en oposición a la cultura anglosajona- pero tienen su propio día de descuentos, el Día del Soltero, que se celebra cada año el 11 de noviembre. Por ello, las ofertas se convierten en una constante durante este período previo a la Navidad.
Ante tal aluvión de bajos precios y de publicidad sobre ellos, no es de extrañar que nuestros impulsos se desaten desde el Black Friday, pues la sociedad de consumo en la que nos encontramos ha caído rendida a las promociones y no hay nada que guste más que la satisfacción de comprar más barato.
Por ello, es importante estar preparados para afrontar la recta final del año sin quedarnos sin ahorros y con la cuenta a cero. La Navidad está a la vuelta de la esquina y el gasto va a dispararse, por lo que es importante ser prudentes con el Black Friday si queremos salvaguardar nuestra economía.
Cómo sobrevivir al Black Friday sin arruinarnos
Cada año por estas fechas, conviene poner sobre la mesa un listado de consejos, trucos o ‘tips’ para no ‘pecar’ más de la cuenta el ‘viernes negro’ y sortear la tentación sin llegar al extremo de encerrarse en casa y quitar a conexión a internet. Es posible comprar y consumir con cabeza todo el año, y también en el Black Friday. Solo hay que tener las ideas claras y algo de fuerza de voluntad. Empecemos.
Lo primero es redactar una lista de los artículos que necesitamos para comprar con rebaja el Black Friday. Lo que REALMENTE necesitamos, no lo que es puro capricho o tendencia pasajera. Recordemos la sabia frase de Warren Buffet, “si no va a cambiar tu vida, no lo compres”.
¿En qué podemos aplicar la cita del gurú de la inversión en el Black Friday?
Esta fecha es idónea para comprar un buen abrigo de cara al invierno, un aparato electrónico que se necesite porque el que tenemos se ha roto o ya está en las últimas -un televisor, un portátil, un móvil, etc-. La tecnología y la electrónica es la que mejores rebajas presenta en Black Friday, por lo que es muy interesante aprovechar para renovar algo o adquirir un producto que tengamos en la wish list desde hace tiempo. También el menaje del hogar estará a descuento y también el mobiliario.
Por supuesto, la ropa es la protagonista de las ofertas. En este caso, repetimos, aprovechemos para comprar solo lo necesario y no solo llenar el armario con prendas que solo ocupen más espacio.
Trabajo de campo previo al Black Friday
Para asegurarnos de que no nos quedamos sin ningún descuento, toca hacer algo de trabajo de campo. Quien algo quiere, algo le cuesta. Por lo tanto, en estos días previos al Black Friday es momento de ir mirando en las diferentes webs de los comercios los productos que nos podrían interesar, comparar dónde es más barato y apuntarlo todo. Así, cuando lleguen los descuentos sabremos a ciencia cierta dónde vamos a ahorrar más.
Igualmente, conviene suscribirse a sus newsletters al menos durante el mes de noviembre, porque por ellas anuncian algunos descuentos que para los clientes que no están registrados pasan desapercibidos. Si se vuelven pesados, podemos dar de baja la suscripción después del Black Friday. Y si no lo has hecho este año, toma nota para el próximo.
Pero antes de todo esto, es imprescindible, de nuevo, hacerse un presupuesto. Sin eso, los demás pasos son inútiles. La cantidad máxima que podemos gastar tiene que estar bien delimitada para que la cosa no se nos vaya de las manos. Sin cantidad fija, siempre se acaba gastando de más.
Intenta ajustarte a ese presupuesto y no salgas de ahí. Piensa que las rebajas de invierno están a la vuelta de la esquina. No hay por qué agobiarse tanto con descuentos y comprar todo ahora. Hay cosas que pueden esperar y que estarán más baratas una vez que pasen las Navidades.
Si vas a hacer las compras de forma presencial, es mejor, si puedes, que vayas el viernes por la mañana temprano, pues habrá menos gente, te agobiarás menos y tendrás más tiempo para mirar y comparar los productos tranquilamente.
En cambio, si vas a hacerlas online, la mayoría de ofertas comienzan el jueves por la noche, por lo que es mejor que tengas tus cestas de la compra preparadas para que solo quede la confirmación del pago y así no te quedes sin eso que necesitas.
Lo principal para cazar gangas en Black Friday es saber claramente qué se quiere y hacer un rastreo previo para tenerlo bien localizado. No hay que dejarse llevar por la publicidad incesante y se debe conservar la cabeza fría, porque de lo contrario acabarás comprando cosas innecesarias y gastando mucho más de lo necesario.