Para aquellos inversores con experiencia en el mundo de los activos reales el ratio oro-plata es un viejo conocido. Sin embargo, para otros inversores se trata de una métrica desconocida. Veámoslo, porque hay evidencia histórica de que es posible obtener beneficios con estrategias de trading basadas en este ratio entre oro y plata.
¿Qué es el ratio oro-plata?
El ratio oro-plata, también conocido como el mint ratio en inglés, hace referencia a la cantidad de plata en onzas que hace falta para comprar una onza de oro. Este ratio puede ser utilizado entre otras cosas para equilibrar y diversificar la cantidad de metales preciosos de su cartera de inversión.
La expresión numérica del ratio funciona de la siguiente forma. Por ejemplo, si el oro cotiza a $2000 la onza y la plata cotiza a $20 la onza, se dice que el ratio oro-plata es de cien a uno (100:1). De igual manera, si el precio del oro estuviera en $1.000/onza y la plata en $20/onza, el ratio oro plata sería de 50:1.
En la actualidad el ratio oro-plata fluctúa y puede variar de valor bruscamente en cualquier momento. Esto se debe a que tanto el oro como la plata cotizan abiertamente en el mercado y, por tanto, su precio oscila según las fuerzas del mercado. No siempre ha sido así históricamente: en algunas ocasiones el ratio ha sido fijado de forma expresa por gobiernos que perseguían una estabilidad monetaria, y cuya divisa estaba vinculada al oro.
La historia del ratio oro-plata
Como hemos visto, este ratio fluctúa según los precios de mercado pero, con anterioridad al siglo XX, los gobiernos llegaron a establecer este ratio para afianzar sus políticas monetarias, aunque a lo largo de los siglos ha sido bastante estable, oscilando entre 12:1 y 15:1.
El imperio romano utilizó oficialmente un ratio de 12:1, mientras que el gobierno estadounidense fijó el ratio en 15:1 en 1792. Durante el siglo XIX Estados Unidos fue uno de los numerosos países que adoptó un sistema bimetálico como sistema monetario, donde el valor de la moneda venía determinado en gran medida por este ratio. Sin embargo, a lo largo del XX se abandonó, en primera instancia la vinculación con la plata y, finalmente se dejó de lado completamente el patrón oro.
Estas son algunas de las fechas que podemos destacar como interesantes en la historia del ratio oro-plata:
- 2020: el ratio tocó el techo de 114,77:1, el punto más alto desde 1915.
- 1991: la plata cotizó a mínimos y el ratio se disparó a casi 100.
- 1980: una de las últimas épocas doradas del oro y la plata en tiempos modernos, el ratio era de 15.
- 1834-1862: el congreso estadounidense cambió el ratio de 15 a 16.
- 1792-1834: el ratio oro-plata estaba fijado en 15 en los Estados Unidos.
- Imperio Romano: el ratio oro-plata estaba fijado en 12.
La importancia del ratio oro-plata
A pesar de no ser un ratio fijo en la actualidad, los traders especializados en metales preciosos siguen utilizando este ratio como herramienta, principalmente para proteger las inversiones en ambos metales preciosos. De forma que cuando un trader tiene una apuesta importante en oro o plata, puede cubrir parcialmente su exposición vendiendo el otro metal precioso.
Pero el ratio también se puede utilizar de forma más especulativa ya que si un inversor tiene una opinión de hacia dónde va a evolucionar el ratio, puede realizar operaciones rentables independientemente de que ambos metales preciosos suban o bajen de precio a la vez apostando por las variaciones en el valor relativo entre ambos metales.
Estrategia de trading del ratio oro-plata
Este tipo de estrategias de inversión suelen realizarse por entusiastas de los activos reales. Principalmente porque el objetivo es la acumulación de más metales preciosos, más allá de su valor monetario. Veamos un ejemplo:
- Un inversor con una onza de oro en su cartera observa como el ratio oro-plata sube a un nivel históricamente alto como 100. En ese momento decide cambiar su onza de oro por cien onzas de plata.
- Cuando el ratio se contrae al otro extremo histórico de 50, el inversor vende sus 100 onzas de plata y con ello puede comprar dos onzas de oro.
- De esta manera el inversor puede seguir acumulando metales preciosos en su cartera, buscando aprovecharse de los puntos extremos del ratio oro-plata.
Con el ratio oro-plata el valor en divisas deja de ser importante
Es interesante señalar que en esta estrategia no se tiene en cuenta el valor de los metales en divisas a la hora de realizar las operaciones. Este tipo de estrategias suelen llevarse a cabo bajo la premisa de que los metales preciosos son capaces de mantener su poder adquisitivo en tiempos difíciles y, por tanto, son una buena alternativa al dinero fiat de los países.
La clave del éxito en una estrategia con el ratio oro plata
La dificultad está en identificar adecuadamente los extremos relativos de valoración entre los dos metales preciosos. Por ejemplo, si el ratio llega a 100 y el inversor vende el oro por plata y posteriormente el ratio oscila entre 120 y 150 durante unos años, el inversor tendrá que decidir entre dejar su dinero atrapado hasta que se vuelva a niveles históricamente más normales o asumir pérdidas.
Por consiguiente, el éxito de esta estrategia de inversión del ratio oro-plata radica en la capacidad de acertar con la evolución del ratio.
Los metales preciosos como el oro y la plata tienen una importancia histórica en el mundo de las finanzas. Durante siglos han sido considerados como medio de pago y depósito de valor. Actualmente para aquellos inversores que quieran diversificar su cartera, las estrategias con el ratio oro-plata pueden ayudar a obtener exposición a esta clase de activos de forma ponderada y sistemática.
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