Seguro que en alguna noticia de las que hablan sobre las medidas adoptadas por el BCE para incentivar la actividad económica has podido leer algo sobre la financiación a bancos y las siglas TLTRO, que es el acrónimo de Targeted Longer-Term Refinancing Operations.
¿Qué es el TLTRO?
Las operaciones de financiación a plazo más largo con objetivo específico (TLTRO) son una de las herramientas de política monetaria no convencionales que utiliza el BCE. Se trata de préstamos a largo plazo que el BCE otorga a los bancos con la finalidad de incentivar la concesión de préstamos a empresas y particulares. El programa se inició en 2014, y en este 2016 se ha ideado el llamado TLTRO2.
Requisitos para acceder
Los bancos que quieran participar pueden obtener hasta un 30% de sus préstamos vivos a empresas y consumidores. Por ello, a mayor volumen de activos sobre esos segmentos (que se supone que forman la denominada economía real), mayor volumen de financiación podrán obtener. La ventaja es que se trata de una financiación mucho más barata de la habitual.
Diferencias con otros programas anteriores
Normalmente, la financiación que ofrece el BCE es a corto plazo, entre una semana y tres meses. En cambio, en los programas TLTRO el plazo de devolución es de hasta cuatro años, con lo cual la gran diferencia es que otorga mucha más estabilidad a la banca para poder refinanciar sus vencimientos. Como depende del volumen de activos de empresas y particulares, se espera que las entidades prioricen operaciones a esos segmentos y de esa forma se reactive la economía.
El precio y el coste de oportunidad
Actualmente, si un banco deposita sus excedentes en el BCE debe pagar un 0,4% ya que la tasa de depósito se sitúa en el -0,4%. Efectivamente, sorprende que los bancos tengan que pagar al BCE para que este les guarde el dinero.
Por contra, el precio de las operaciones TLTRO dependerá del volumen de préstamos concedidos. A mayor volumen, menor precio, pudiendo incluso llegar a cobrar hasta ese 0,4%.
Por tanto, un banco que no preste a empresas/particulares puede pagar 40 puntos básicos por los fondos; en cambio, uno que preste se beneficiará de lo que le cobre al cliente además de tener acceso a una financiación más barata.
El lado oscuro del TLTRO
Se trata de un instrumento polémico, pues muchos consideran que no se está consiguiendo incentivar la financiación a empresas y consumidores.
Este programa contradice en cierta manera a la regulación de los bancos, que también forma parte de las competencias del BCE. Por un lado, el banco central les pide a los bancos que den crédito y por otro, cada vez penaliza en mayor medida este tipo de crédito a la hora de calcular los ratios de capital de las entidades.