Uno u otra está siempre presente en los carteles de bancos, en sus páginas web y en la letra pequeña de los contratos de préstamos y productos financieros. También te los han cantado al final de anuncios en la radio o los has visto pasar corriendo en anuncios en lo más bajo de la pantalla de tu televisión. Para que te quede bien claro qué es cada uno, te los explicamos de forma muy sencilla en este Lexiconómico.
Ambos términos reflejan qué porcentaje va a rendir nuestro dinero en el caso de una inversión, y cuánto nos va a costar financiarnos en el caso de necesitar un préstamo. Pero mejor, veámoslos por separado:
Qué es el TIN.
TIN es la abreviatura de tipo de interés nominal.
- Referido a una inversión, es la cantidad expresada en términos porcentuales que vemos incrementado nuestro capital al llegar su vencimiento.
- Referido a un préstamo, son los intereses que cobra el banco por dejarnos dinero, expresado en términos porcentuales.
Un ejemplo sencillo: contratamos un depósito de 10.000 euros a cuatro meses con un TIN anual del 3%. Quiere decir que cuando pasen esos cuatro meses, el capital será 10.100 euros. Esos 100 euros de rentabilidad salen del siguiente cálculo:
10.000 x 0,03 x 4 / 12.
El mismo ejemplo, aplicado a un préstamo a cuatro meses, significa que para prestarnos esos 10.000 euros, el banco nos ha cobrado 100 euros de intereses.
Qué es la TAE.
En el TIN no se incluye ningún gasto, comisión o seguro y solamente se refiere a cuánto nos da un banco por nuestro dinero en un tiempo determinado, o cuánto nos cuesta que nos preste dinero por un tiempo determinado.
En cambio la TAE, o tasa anual equivalente, incluye los gastos añadidos a la operación y siempre se refiere al período de un año. De esa manera se homogeneizan los productos financieros y resulta más fácil comparar y decidir cuál es más ventajoso para nuestra economía.
Los gastos que se incluyen en el cálculo de la TAE son:
- Comisiones.
- Seguros para garantizar el pago (en préstamos).
Cómo se calcula la TAE.
Para calcular la TAE a partir del TIN se usa la siguiente fórmula:
r es el TIN expresado en tanto por uno (para el 3% podríamos 0,03).
f es la frecuencia, o el número de veces que nos dan o cobran intereses (1 es anualmente, 2 semestral, 3 cuatrimestral, 4 trimestral, 6 bimestral, 12 mensual).
Si hay gastos o comisiones, para calcular la TAE tendríamos que calcular en primer lugar la cuota de amortización y luego con una calculadora científica resolver una progresión geométrica. Sin embargo, a efectos prácticos se utilizan hojas de cálculo, calculadoras que ya incluyen la fórmula o páginas como la del Banco de España. Así, por ejemplo, si pedimos un préstamo anual de 5.000 euros, con una comisión de apertura del 2% y un tipo de interés nominal del 7%, la TAE será del 11,35%.