Con el siglo XXI muy avanzado, de cada nuevo año se esperan muchas cosas, muchos cambios y mucha innovación. Y ahora más que nunca, por encima de todo, sobresale una idea: la sostenibilidad. En 2019 la preocupación por el estado del planeta y del medio ambiente emergió de una forma nunca vista gracias al empuje de los jóvenes, los que ‘heredarán’ la Tierra y quieren evitar que se destruya como hasta ahora. Recycling y upcycling, dos términos que no pueden faltar en tu vocubulario.
El cambio climático es el gran enemigo, y a todos nos corresponde frenarlo. No solo a los gobiernos y empresas, sino a cada uno de nosotros, pues un pequeño gesto suma, aunque no lo parezca. Se nos ha llamado a la acción y nos corresponde actuar, pues la devastación del medio es más que evidente, aunque muchos todavía la nieguen.
Por ello, cada año es decisivo para dar ese salto tan importante que la sociedad espera. Ya no hay marcha atrás, o somos sostenibles o nuestra conducta no va a ser aceptada. Aunque muchos todavía se sienten perdidos en este nuevo contexto ‘verde’, pues hay numerosos nuevos conceptos y formas de ser sostenible que se desconocen, sobre todo las generaciones más adultas que están menos apegadas a las redes sociales, donde la sostenibilidad es trending topic.
Hoy vamos a diferenciar dos de los conceptos clave de este terremoto ‘verde’, recycling y upcycling.
La nueva forma de reciclar
Reciclar es un concepto que todos, más o menos, manejamos, sobre todo con lo referente a los residuos orgánicos e inorgánicos que generamos en nuestros hogares. Pero en pleno siglo XXI, le hemos dado una vuelta de tuerca al concepto para que sea mucho más efectivo en el medio ambiente: ahora hablamos de recycling y upcycling, dos palabras, prestadas del inglés, que son básicas en esta nueva oleada ecologista.
Cuando hablamos de recycling nos referimos al proceso tradicional de reciclaje, que es industrial y gracias al cual se transforma un residuo en material nuevo que se emplea para producir nuevos bienes o artículos. Pero este concepto ha evolucionado y ha dado un paso más allá, que le hace más completo.
Aquí entra en juego el upcycling, también llamado ‘supra-reciclaje’, en el que entra en juego la creatividad. Supone la transformación de objetos existentes que ya tenemos para darles una vida nueva y no tirarlos a la basura. De este modo, se reutilizan las cosas que ya tenemos y evitamos consumir más, pues el consumo es el principal causante de la deriva climática actual.
El upcycling es una forma de combatir el consumo desaforado, usando la imaginación, sobre todo, cuando algo se rompe o pasa de moda. Gracias a él, por ejemplo, se puede dar una segunda vida a prendas de hace unos años, transformándolas en otras -unos vaqueros en unos shorts, las camisetas viejas en trapos para limpiar, etc-.
Muy popular se ha hecho el reciclaje de muebles. Aunque las antigüedades es algo que ya viene de lejos, ahora se reutilizan sofás, mesas o sillas para crear otros objetos, o más sencillo todavía, convertir un bote de conservas en un tupper para llevar caldos o purés a la oficina.
Todo es posible si se usa la imaginación, y en eso consiste esta nueva tendencia. Bien es cierto que no todo el mundo es ‘manitas’ ni se le ocurre cómo puede dar una segunda vida a sus cosas, pero para eso tenemos internet. Existen multitud de páginas web y perfiles en redes sociales que enseñan cómo reciclar objetos y convertirlos en otros, incluso con tutoriales.
Así, la nueva era sostenible propone usar la imaginación para favorecer al planeta y dejar de consumir de forma sistemática. Incluso las propias empresas también están llevando a cabo su propio upcycling para no quedar obsoletas y estar acorde a los valores que tienen sus clientes. Pues, si no son sostenibles, les acabarán dando la espalda.