Si hace apenas dos semanas fue el Fondo Monetario Internacional el que elevó su previsión de crecimiento para España, esta vez lo ha hecho un organismo que conoce más de cerca nuestra economía: la Comisión Europea.
Nuestros socios europeos han elevado hasta en tres décimas su estimación de PIB, de manera que creen que España crecerá un 2,9% este año y un 2,4% en 2020. Ambas lecturas superan en una décima las estimaciones del Fondo Monetario Internacional.
Entonces…¿qué pasa si crecemos más?
Una mayor PIB repercute positivamente en muchos aspectos:
- En el empleo
Teniendo en cuenta que los principales componentes del PIB son el consumo, la inversión y las exportaciones, si todas estas partidas aumentan sería lógico que la mayor demanda requiera de un mayor número de trabajadores por parte de empresas y de la Administración.
Por tanto, otra de las cosas que ha hecho la Comisión Europea es mejorar la previsión de nuestra tasa de paro, que podría finalizar 2019 en el 14%. En lo que a salarios se refiere, este organismo prevé que aumenten un 1,1% y un 1,6% en los próximos dos años.
- En la proporción de deuda
La acumulación de déficits de la economía española en los últimos años ha hecho que el ratio de deuda respecto a PIB haya alcanzado el preocupante nivel del 99%. Es decir, que las Administraciones Públicas deben 1,16 billones de euros, una cifra muy aproximada al PIB de españa: 1,17 billones de euros.
Lo bueno es que de cara a los próximos años, si logramos que el dato de PIB (denominador) supere al de déficit (numerador), la proporción se irá reduciendo.
- En el Ibex
Aunque es indudable que a las empresas españolas les favorece que haya una mayor actividad económica en España, un aumento de PIB no tiene necesariamente que traducirse en una subida de las cotizaciones. Vivimos en un mundo cada vez más globalizado que ha hecho que lleguemos al punto de que solo el 37% de los ingresos de las empresas del Ibex-35 proceden de territorio doméstico (fuente: FT).