Bien sabemos que enero tiene una empinada cuesta que se hace muy dura y muy larga. Además de que la mayoría estamos bastante escasos de dinero tras las fiestas navideñas, se une la apatía que genera el invierno y el síndrome postvacacional tan habitual en esta época y en septiembre. No obstante, enero es un buen momento para poner en orden nuestras finanzas domésticas.
Y nos referimos, precisamente, a los gastos. Evidentemente, hay gastos que no se pueden recortar, como la comida, el alquiler o hipoteca o los que generan los niños. Pero hay otro tipo que sí conviene revisar a principios de año para ver si estamos gastando más de lo necesario. La ventaja de revisarlo ahora es que así lograrás un ahorro durante el resto del año. Y ese sí que es un buen propósito para 2018. Vamos a ver dónde podemos meter la tijera.
Luz, gas, agua…
Estos gastos son ineludibles. No podemos vivir sin luz, gas o agua, especialmente en invierno, cuando el frío aprieta. Pero sí podemos revisar si es posible ahorrar un poco en el suministro. A parte de tomar algunos hábitos para no gastar tanto (como apagar las luces de las habitaciones vacías, mantener la calefacción por debajo de 21º, desenchufar aparatos eléctricos que no se usen, etc.), podemos hacer un análisis exhaustivo de nuestra factura.
Primero, porque puede que tengamos más potencia contratada de la necesaria. Y segundo, porque es posible que estemos en la compañía más cara o tengamos una tarifa demasiado alta. Por ello, conviene rastrear las ofertas que tiene el resto de compañías eléctricas (en enero, además, salen bastantes) y ver si hay alguna que nos interesa más.
De hecho, alguna de las nuevas empresas que han empezado a operar en este sector ofrecen tarifas planas a precios competitivos e incluso agrupan los gastos de luz y agua en una misma factura, lo que acaba suponiendo un ahorro. Pero si no queremos cambiar de compañía, podemos llamarles para exponer nuestro caso y ver cómo podemos ahorrar, pues seguro que hay alguna forma de hacerlo.
Teléfono, Internet… ¿imprescindibles?
Otro gasto que se ha vuelto imprescindible es el del teléfono y, por supuesto, la conexión a Internet. No podemos vivir desconectados, eso es un hecho. Ya no solo por puro enganche a las redes sociales y demás servicios que ofrece la red, sino porque es una herramienta básica para trabajar, sobre todo para quienes teletrabajan o estudian.
Ya hay muchas tarifas para tener Internet en casa que no obliga a tener línea telefónica fija, sobre todo con la fibra óptica. Así que no está demás que te pares a mirar opciones para prescindir de un gasto totalmente innecesario.
Seguros, también es importante
Los distintos seguros que tengamos contratados también podemos revisarlos en enero. Como ya hemos mencionado, en este mes las compañías suelen lanzar ofertas para captar nuevos clientes, por lo que conviene interesarse por ello para ver si sale más rentable cambiar a una diferente o se puede negociar una rebaja de la prima con la que estamos.
Igualmente, es importante ver si tenemos los seguros que realmente necesitamos. Porque puede que en alguno de los seguros contratados venga incluida una prestación que no utilizamos y que hace más caro el importe. Por ello, debemos poner a examen nuestros seguros para ver si podemos ahorrar algo en este apartado.
Suscripciones, siempre hay más de la cuenta
Otro tema importante es el de las suscripciones. Si lo pensamos bien, estamos suscritos a multitud de plataformas, páginas web, e-commerces, etc. que al final se nos acaba yendo buena parte del sueldo en pagar estos recibos que, uno por uno parecen poca cosa, pero que todos de golpe suman una buena cantidad. Revisa si merece la pena tanta suscripción y si realmente les sacas partido.
Igualmente, párate a pensar si de verdad te merece la pena pagar la cuota mensual del gimnasio cuando lo pisas dos días. Si es así, mejor date de baja y apuesta por los deportes al aire libre. Al menos, si no eres constante no te dolerá en el bolsillo.
Comisiones, no olvidar
Por último, tenemos el tema de las comisiones bancarias en la libreta de ahorro, tarjetas de crédito y débito, depósitos, productos financieros, etc. Enero es igualmente buen momento para echarles un ojo y ver si nos están cobrando comisiones demasiado altas por tarjetas que casi no usamos o cuentas corrientes prácticamente vacías.
En ese caso, en Self Bank puedes encontrar opciones como la Cuenta Self, que no tiene comisiones, permite realizar transferencias sin costes y podrás disponer de tarjeta de débito. Al igual que ocurre con la Cuenta Nómina o la de Ahorro.
En resumen, enero es un buen mes para empezar de cero, revisar gastos y recortar donde sea necesario. Por mucho que cueste dejar atrás algunas cosas. El resto del año, lo agradecerás.