»El interés compuesto es la fuerza más poderosa de la galaxia»
Esta afirmación tan taxativa es ni más ni menos que de Albert Einstein y nos da una idea del efecto exponencial que puede tener sobre nuestros ahorros la aplicación del interés compuesto.
Pero, ¿qué hay detrás de este concepto?
Conceptualmente es relativamente simple: se trata de ir reinvirtiendo una determinada cantidad de dinero y la rentabilidad que nos va dando esta a lo largo del tiempo.
Es decir, requiere de un doble esfuerzo de ahorro: por un lado la cantidad inicial con la que empezamos a ahorrar, y por otro evitar gastarse los intereses que esta inversión nos genera año a año.
¿Te haces una idea del dinero en el que se convierten 15.000 euros invertidos al 5% durante 25 años seguidos? Agárrate a la silla.
Estamos hablando de que ese capital se convierte en más de ¡50.000 euros!, concretamente 50.795 euros. Más del triple. Estos serían los cálculos:
Probablemente pensarás que tal y como están las cosas es difícil ahorrar los 15.000 euros del ejemplo. O quizá sí tienes el dinero ahorrado, pero crees que vas a necesitarlo antes de 25 años.
Por eso te animamos a que hagas tu propia simulación. Para ello, simplemente tienes que aplicar la fórmula del interés compuesto:
Para realizar tu propia simulación necesitarás sacar del baúl de los recuerdos tu vieja calculadora financiera o abrirte una hoja de Excel y calcularlo.
No obstante, te vamos a poner algunos ejemplos de cuánto tiempo y cuánta rentabilidad anual necesitas para duplicar tu dinero, es decir, para que 10.000 euros se conviertan en 20.000 euros:
- 14 años y 2 meses invirtiendo a un 5%, o
- 7 años y 3 meses a una tasa anual del 10%, o
- 23 años y medio invirtiendo al 3%.
También existe la regla matemática del 72, que si bien no es exacta resulta fácil de aprender. Lo del 72 no viene del año en el que se destapó la trama Watergate, ni por las olimpiadas de Munich celebradas ese verano, sino porque si divides entre 72 una rentabilidad anual, obtienes el tiempo necesario (en años) que tardarás en doblar tu capital.
En el próximo post te explicaremos cuáles son las 3 claves para maximizar tus ahorros a largo plazo, y en el siguiente nos daremos un baño de realidad y repasaremos cómo puede afectar la inflación y cómo se han comportado históricamente las clases de activo donde podemos ir invirtiendo nuestros ahorros: bolsa, deuda pública, etc… para hacernos una idea realista de cuánto podemos maximizar nuestros ahorros.
La reinversión y el potencial del interés compuesto (II)
La reinversión y el potencial del interés compuesto (III)