Llegan las vacaciones para muchos españoles y empezamos a hacer planes. Aunque los efectos de la crisis han sido duros y un elevado porcentaje de españoles no puede permitirse grandes alegrías, necesitamos descansar y cambiar de aires, aunque sea por unos días.
Quizás sepas que en este blog hemos iniciado el reto Self Bank, con la idea de que vacaciones no es sinónimo de cuenta corriente tiritando. En el artículo de hoy te presentamos diferentes alternativas para que puedas disfrutar de este tiempo de ocio sin que tu bolsillo se resienta demasiado.
Además, también te hemos contado maneras de ahorrar para que este verano cuentes con un dinerillo extra que te permita ir un poco más desahogado.
Otra posibilidad es la de que pongas en práctica el reto de los 30 días, que te ayudará a ahorrar casi sin darte cuenta.
En cualquier caso, las vacaciones pueden ser muy largas y no podemos estar de viaje el mes entero. Entonces, ¿qué hacemos el resto del tiempo? ¿Sabes qué planes baratos puedes llevar a cabo en vacaciones para acabar de completar esos días en los que no sabes qué hacer?
Disfruta del lugar en el que vives como un turista
Las prisas y nuestros quehaceres diarios nos impiden en muchos casos admirar pequeñas joyas con las que contamos en la localidad en la que residimos. Si vives en una zona mínimamente turística (¡y en nuestro país es fácil que así sea!), seguro que te habrás encontrado muchas veces con viajeros encantados con lo maravilloso que es un paraje cercano, esa ruta de senderismo, la vista que hay desde aquel mirador, ese monumento o edificio antiguo medio escondido… Sitios que posiblemente conozcas (o quizás, en algún caso, no), de los cuales también tú puedes disfrutar, aunque vivas ahí todo el año.
En otras ocasiones, por el contrario, nosotros vamos a otros sitios y quedamos asombrados de la belleza que podemos encontrar en ellos, mientras que no reparamos en lo que tenemos en nuestra casa.
Por eso, una buena recomendación puede ser que pasees por tu ciudad o pueblo como si fueses un turista más. Redescubre el lugar en el que vives, seguro que lo pasarás genial y lo vivirás de un modo distinto.
Actividades urbanas
Pueblos y aldeas
Si puedes disponer de una casa en el pueblo o en la aldea, la alternativa está clara. Tendrás alojamiento gratuito y podrás disfrutar de más tranquilidad, lejos del ajetreo y bullicio de las grandes ciudades. Internet puede ser aquí una vez más un gran aliado, ya que seguramente, con un vistazo en el buscador, encontrarás cosas interesantes cercanas a tu pueblo que desconocías que existían.
Playa o montaña
La clásica pregunta desde tiempos inmemoriales: ¿Qué prefieres, playa o montaña? Si vives cerca de la costa o tienes montañas cerca, el buen tiempo veraniego es ideal para disfrutar al aire libre. Puedes hacer excursiones y conocer nuevas playas o senderos cada día, sin ataduras. Y por poco dinero, el coste del desplazamiento y poco más, porque también es divertido preparar unas tarteras o unos bocadillos y comer al aire libre. ¡Vete de excursión y disfrútalo!
Una recomendación especial en este sentido es la de hacer el Camino de Santiago. Cientos de miles de personas recorren cada año la ruta de peregrinación más antigua de Europa, en algo que va mucho más allá de las motivaciones religiosas, para convertirse en un reencuentro con uno mismo y con la naturaleza, atravesando parajes de gran belleza.
Fiestas de verano
Aunque quizás no haya que incidir demasiado en el tópico, España es un país en el que hay muchas fiestas. Algunas de ellas incluso están declaradas como fiestas de interés turístico nacional o incluso internacional por el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio.
Pero aun no siendo tan importantes como estas, en casi cualquier zona podemos encontrar fiestas veraniegas, en las cuales disfrutaremos de música y espectáculos, en muchas ocasiones gratuitos, y gastronomía a precios muy razonables. ¿Te lo vas a perder?