¿Te ha ocurrido en alguna ocasión que una vez hechos, te arrepientes de gastos absurdos que afectan a tus ahorros? Seguramente también te hayan surgido dudas como, qué porcentaje de tus ingresos debas destinar al ahorro o si deberías hacer una planificación de tus finanzas para evitar esos gastos innecesarios.
Estas preguntas te rondarán por la cabeza un sinfín de veces. Con independencia del nivel de ingresos que tengas, la elaboración de un presupuesto personal es una herramienta imprescindible que te ayudará a sacar más partido a tu dinero.
Aunque a priori parezcan insignificantes, muchos pequeños gastos que realizamos sin darnos cuenta, pueden acabar representando una gran parte del presupuesto familiar y a veces, incluso ser una traba a la realización de nuestros proyectos. Es fundamental eliminar esos gastos innecesarios, y podemos conseguirlo sencillamente prestando atención a nuestros hábitos.
Cuando hablamos de la elaboración de un presupuesto hacemos alusión a los flujos de caja (entradas y salidas de dinero) que hemos tenido en el pasado y pensamos que vamos a tener en el futuro, a lo que sumamos una serie de gastos imprevistos o contingencias. ¡Realmente las finanzas personales son como las finanzas de una empresa!
El presupuesto nos puede ser útil para:
- Evaluar y priorizar gastos.
- Saber en qué nos gastamos el dinero.
- Hacer previsiones de futuro.
- Llevar un seguimiento para no desviarnos, comparando lo que pensábamos que nos íbamos a gastar y lo que realmente nos gastamos.
- Acumular un fondo para imprevistos y en general vivir más tranquilos.
En la siguiente imagen puedes ver de una forma práctica cómo ejercer de controller de tus finanzas personales.
Paso 1: Elabora a mano una lista de ingresos y gastos fijos mensuales como comida, hipoteca, coche o facturas.
Paso 2: Añade diferentes gastos que tengan un carácter periódico. Te ayudará a que no te pillen por sorpresa y a que no te fastidien los planes de ese mes.
Paso 3: Vuelca la información a un hoja de cálculo, poniendo los ingresos en azul y los gastos en rojo, lo que teayudará a visualizarlo mejor.
Paso 4: Anota los gastos reales en la misma hoja de cálculo
Paso 5: Compara los gastos reales con los gastos que previamente hayas identificado para la elaboración del presupuesto y realiza ajustes prestando atención a las partidas que más gastas