Llega el verano, la ola de calor y con ello, las ansiadas vacaciones. Si alguna vez has escogido un destino vacacional que está fuera de España, es posible que ya te hayas llevado una ingrata sorpresa en tu factura telefónica a la vuelta de tu viaje vacacional.
¿Qué es el roaming?
El roaming, también conocido como itinerancia, es el uso de tu terminal móvil en una red que no es la propia. Esto es, si yo soy cliente de cualquier operadora nacional, en cualquier país fuera de España usaré la red de otro operador y por tanto, estaré usando ese servicio.
El cobro puede ser tanto por servicio de voz como de datos. Como particularidad, en el servicio de voz se cobra tanto por llamar como por recibir la llamada, porque en ambos casos se está haciendo uso de la red ajena.
¿Cuáles son las tarifas que voy a pagar si uso el servicio?
No hay ningún baremo concreto. Depende absolutamente de los acuerdos que nuestro operador tenga con las empresas del país en el que usemos nuestro teléfono. Por tanto, si creemos que vamos a necesitar usar el móvil, es fundamental que antes de viajar consultemos las tarifas que nos va a facturar nuestra compañía en el país de destino.
¿Podemos ahorrar si somos previsores?
Sí. Podemos informarnos en nuestro operador, ya que muchos de ellos ofrecen packs y bonos, especialmente en verano, que pueden suponer un ahorro muy importante. Puede ser necesario activarlo primero desde España, por lo que debemos tenerlo claro antes de viajar. En todo caso, es un buen complemento a nuestro artículo sobre los 9 consejos para ahorrar viajando.
¿Podemos seguir “conectados al mundo” sin usar el roaming?
Actualmente, hay muchos servicios y aplicaciones que minimizan la necesidad de usar nuestro propio terminal en itinerancia. Pero es obvio que el wifi es nuestro gran aliado.
Lo más evidente es que nos permite conectarnos a internet de forma que podemos contactar por email o por servicios de mensajería instantánea, pero también podemos hacer llamadas gratuitas mediante diversos programas de videollamada, o incluso llamadas “normales” a teléfonos fijos o móviles vía VOIP o mediante Skype.
¿Hay algún cambio a la vista?
Pese a que el cobro del servicio se basa en las facturaciones que hay entre operadoras por dar servicio al cliente extranjero, la UE tomó cartas en el asunto al considerar que en estas tarifas a ciudadanos europeos existe una desproporción entre el coste efectivo del servicio y lo que se le imputa al cliente.
Por ello, está aprobado que a partir de 2017 se eliminen los cargos por roaming a ciudadanos europeos para favorecer las comunicaciones dentro de la Unión Europea y el acceso universal a internet.