Repo, prestando dinero al banco

Repo es una operación de compraventa de activos con pacto de recompra. Por su alta liquidez y bajo riesgo, dichos activos habitualmente son valores de deuda pública, aunque también podría realizarse sobre títulos de renta fija privada.

Se trata de una operativa que se suele llevar a cabo entre inversores institucionales, principalmente entre bancos. Son una especie de préstamo encubierto en el que uno de los bancos pide financiación a otro banco, que le exige como garantía de pago un bono en concreto.

Un repo se formaliza en un contrato de compraventa especial en el que vendedor y comprador se comprometen a deshacer la operación a un precio y en una fecha establecidos en ese momento. Hay que señalar que suelen ser inversiones a corto plazo, con fecha de recompra preestablecida a un día, tres días, una semana, o varios meses.

Prestando dinero al banco

Los repos son operaciones en las que los bancos obtienen liquidez cediendo temporalmente títulos de su cartera de bajo riesgo y rentabilidad (bonos, obligaciones o letras) a inversores particulares o a otros bancos dentro del mercado interbancario. Por tanto, los repos podrían asemejarse a un préstamo a corto plazo a una entidad financiera.

El inversor no puede vender ni volver a ceder esos títulos a un tercero si con ello se viera comprometida su disponibilidad en la fecha establecida para ser devueltos al banco.

El tipo de interés que obtiene el inversor viene determinado por la diferencia entre el precio de compra y el precio de venta, descontando los gastos y comisiones. Al ser una operación instrumentada en títulos del Tesoro Público, la rentabilidad es muy reducida.

Existen dos tipos de repos, en función de cómo se custodian los títulos cedidos:

  • Bilateral: el banco que vende los títulos también los custodia.
  • Trilateral: se depositan en otra entidad financiera para su custodia.

Por último, desde el punto de vista del inversor, cabe señalar que debido a las características del repo -corto plazo, alta liquidez y bajo riesgo- en la práctica su uso se reduce a puntas de tesorería, es decir, a excedentes de liquidez muy limitados en el tiempo.