España lleva un par de años presentando cifras macroeconómicas positivas, especialmente en los que a PIB y crecimiento del empleo se refiere.
La gran asignatura pendiente sigue siendo la inflación, cuyo último dato muestra una caída del 0,8% en los precios. esperemos que las últimas medidas anunciadas por el BCE sirvan de revulsivo.
De cara al 1T se espera un ligero enfriamiento de la actividad como muestran las cifras de ventas minoristas, de precios de la vivienda y de producción industrial, que si bien siguen creciendo, lo hacen a un menor ritmo.
Es previsible un descenso de la inversión debido a la incertidumbre política y a un escenario macro más adverso en el resto del mundo, especialmente en los países emergentes de Asia y Latinoamérica.
Los últimos datos de la encuesta PMI manufacturero también muestran cierta ralentización en el sector, lo que podría deberse entre otras cosas a la revalorización que ha registrado desde inicios de año el euro frente al dólar. No obstante las cifras de PMI tanto servicios como manufacturero, ambos en 54,1 puntos, son unas de los más elevadas de la zona euro y se encuentran en clara expansión.
La tasa de desempleo volvió a mejorar en el 4T, encadenando 10 trimestres consecutivos a la baja tras situarse en 20,93%.