Si eres de los que siguen habitualmente las noticias económicas, verás cómo, en muchas ocasiones, la evolución de las bolsas, al alza o a la baja, se justifica por la publicación de determinados datos macroeconómicos o por diversos estudios emitidos por prestigiosas instituciones.
Entre estas últimas se encuentra el IFO (instituto para la investigación económica), el organismo de investigación económica más influyente de Alemania y, por lo tanto, con un gran peso en la Unión Europea.
Qué es y a qué se dedica el IFO
El IFO nació en 1949, y tiene su sede en Múnich. Con casi 200 empleados (de los cuales, aproximadamente la mitad son investigadores), elabora diversos estudios e investigaciones empíricas, realizando también labores de asesoramiento. Es una institución sin ánimo de lucro, cuyos fondos son mayoritariamente públicos, y con fuertes vínculos con la universidad muniquesa.
Sus investigaciones se centran en diversas áreas económicas, entre otras:
- Análisis y encuestas de los ciclos comerciales.
- Finanzas públicas.
- Política social y mercados de trabajo.
- Organización industrial.
- Comercio internacional.
- Energía y medio ambiente.
Además, realiza un informe sobre la economía alemana y mundial dos veces al año, en primavera y otoño, en colaboración con otros tres institutos germanos: el IfW, el IWH y el RWI.
Las encuestas IFO
Lo más famoso del instituto alemán son sus encuestas. No son políticas, como estamos acostumbrados en España, sino económicas, y tienen una gran influencia, puesto que de las perspectivas que se obtienen de ellas, se hacen previsiones económicas para toda la Unión Europea, y de ahí se derivan decisiones de inversión en función de esas expectativas.
La encuesta se realiza a más de 7.000 empresas, incidiendo en dos aspectos: la situación actual y las expectativas de negocio. Es decir, que se trata de analizar cómo se ve la coyuntura actual, y qué se espera del futuro (en los próximos seis meses). En función de sus resultados, se pueden extrapolar cuáles son las perspectivas de la economía alemana y, por extensión, de la Eurozona (la economía germana representa, aproximadamente, la cuarta parte de la de la zona euro).
El valor base es el 100, de manera que puntuaciones por encima de esta cifra, indican un sentimiento positivo por parte de los encuestados, mientras que, si están por debajo, indicarían una percepción negativa.
Como suele suceder en economía, también es importante la tendencia que muestra el indicador; por ejemplo, si el valor obtenido un mes es 110, pero lleva varios meses consecutivos descendiendo, no es tan positivo.
Además, también hay que observar las posibles divergencias entre el valor esperado por los analistas, y el que finalmente sale. Es lo mismo que sucede, por ejemplo, con la cotización de las acciones cuando se publican resultados. Si están por debajo de lo esperado por los analistas, aunque sean positivos, puede significar que quizás no sean tan buenos, ya que las expectativas anteriores estaban infladas.