La crisis ocasionada por el COVID-19 ha generado grandes consecuencias en muchos aspectos; no solo en el sanitario, con el aumento de la presión hospitalaria, sino también en el social —con las necesarias medidas de distanciamiento social— y en el económico, con miles de negocios sufriendo las consecuencias del descenso del consumo y el cierre de actividades consideradas no esenciales para controlar la evolución de la pandemia. ¿Qué sectores resisten mejor la crisis?
Evolución por sectores desigual
Lógicamente, la pandemia no ha afectado por igual a todos, y algunos sectores han visto cómo mejoraba su facturación, incluso de forma muy significativa. Durante el confinamiento, la venta de productos como mascarillas, guantes y geles hidroalcohólicos aumentó un 1.335%, pero también otros relacionados indirectamente, como los complejos vitamínicos.
El encierro en los hogares también motivó el aumento de la demanda de entretenimiento en casa, en forma de consolas, televisión, bicicletas estáticas y otros aparatos de gimnasia, o incluso máquinas de coser.
A medida que han ido pasando los meses, las cosas han ido cambiando y pasando por diferentes fases. Con la desescalada, los sectores relacionados con el ocio, la hostelería y el turismo recuperaron parcialmente su actividad, aunque posteriormente la segunda ola de la pandemia volvería la situación al estadio anterior.
Las noticias sobre las vacunas son positivas, con laboratorios anunciando resultados prometedores en sus pruebas y comenzando los planes de vacunación en ciertas zonas geográficas. Cientos de millones de dosis se mueven por todo el mundo y los gobiernos se preocupan por optimizar los calendarios de vacunación.
En esta tesitura tan cambiante, hay sectores que salen ganando y otros que salen perdiendo en función de las circunstancias. ¿Qué nos podría deparar el futuro?
Tres empresas que han crecido con la pandemia
2020 quedará para la historia como el año de la pandemia de la COVID-19. Aunque antes hubo otras epidemias, la economía no estaba tan globalizada como ahora, por lo que la expansión del virus en este caso se ha producido de manera muy rápida y a escala mundial, provocando un cataclismo sanitario y económico.
El cierre de muchos negocios, las limitaciones de aforo y el aumento del teletrabajo han beneficiado a algunos sectores, especialmente los relacionados con internet y las comunicaciones a distancia.
Así por ejemplo, si observamos la evolución de Netflix, vemos cómo el auge del consumo de series y películas por streaming ha potenciado la cotización de su acción, que ha subido un 61% respecto al valor que tenía un año antes (y ha llegado a estar un 76% por encima).
Así ha sido su evolución en comparación con la del Dow Jones:
Mientras el índice general apenas ha conseguido recuperar el terreno perdido tras las caídas de marzo (a final de 2020 está alrededor de un 5% por encima de sus registros de un año antes), las acciones de Netflix están más de un 70% por encima que un año antes.
Si analizamos el caso de Amazon, vinculado a internet pero también al consumo desde el hogar (ya que muchas personas han cambiado incluso sus hábitos en la compra de productos básicos), observamos que su acción está un 71% por encima del valor que tenía hace un año (y ha llegado a estar un 94% por arriba).
Veamos ahora el caso de la compañía de videoconferencias Zoom. Con el auge de este tipo de comunicación, la subida que acumula desde hace un año es del 482%, aunque ha llegado a estar un 667% por encima.
Qué sectores podrían despuntar en el futuro
Sin utilizar una bola de cristal y sin ánimo de realizar una predicción, veamos ahora el otro lado de la moneda. Algunos analistas apuntan a que los desplomes en determinados sectores pueden ser una buena oportunidad de entrada en los mismos, si estos comienzan poco a poco a recuperar niveles pre-COVID.
Por otra parte, el consenso de analistas apunta que el sector farmacéutico también podría seguir siendo una oportunidad, dado que parece que el coronavirus va a permanecer tiempo entre nosotros, y que además se estima que existen miles de virus todavía por descubrir.
Asimismo, algunos analistas ponen su punto de mira en los sectores más afectados por la crisis del Covid-19 como el sector turístico, que ha sido uno de los más impactados por la pandemia, y todavía continuará afectado durante un tiempo. La incertidumbre sobre la situación epidemiológica y la eficacia de los planes de vacunación serán claves para la evolución de las cotizadas de este sector.
Otro sector afectado ha sido el petróleo, llegando incluso a niveles negativos en tramos del año ante las desviaciones entre la oferta y la demanda de crudo, lo que obligó a la OPEP+ a trazar un plan de reducción de la oferta del mismo para estabilizar su precio.
En conclusión, hay sectores que han visto cómo su negocio se incrementaba a causa de la pandemia, que todavía pueden sacar réditos de esta nueva normalidad, y otros que se han visto muy afectados por la situación, pero que podrían recuperarse si las cosas volviesen a ser como antes, al menos en parte. De cómo se decante la balanza dependerá cómo deberíamos reajustar nuestra cartera, siempre teniendo presentes los niveles de riesgo que estamos dispuestos a asumir.
Todo ello en un contexto en el que la crisis sanitaria ha acelerado algunas de las megatendencias que ya se perfilaban de aquí a 2030. Además, de la penetración de las tecnologías de la información en nuestros hábitos sociales y formas de trabajar, ganando protagonismo los sistemas híbridos, también destacan los avances relacionados con su aplicación al sector financiero o sanitario, entre otros. En un escenario en el que continuará el despliegue del 5G, que continuará hacia el desarrollo del llamado 6G, y el protagonismo creciente de la robotización, automatización y la inteligencia artificial. A su vez, la pandemia ha impulsado la importancia de lograr un crecimiento más sostenible desde el punto de vista medioambiental, ganando protagonismo la transición energética destacando no solo las energías renovables, sino también el desarrollo de baterías y del uso de vehículos eléctricos, entre otros ámbitos. En conclusión, sectores que se verán reforzados también por los planes de recuperación diseñados por los gobiernos para garantizar un crecimiento sostenible e integrador tras esta crisis sin precedentes.
Las gráficas incluidas en este artículo son de elaboración propia, utilizando datos de Yahoo Finanzas.
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