Los inversores minoristas no tienen acceso a información en tiempo real sobre el mercado de bloques, a menos que tengan un terminal como el de Bloomberg y sepan manejarlo. Así, sólo pueden intuir que se ha producido una transacción cuando sienten el impacto en la cotización de una empresa.
En el mercado de bloques se llevan a cabo operaciones de gran volumen de acciones, tras un acuerdo entre vendedor y comprador. Sin embargo, para conocer oficialmente esos grandes movimientos hay que esperar a los comunicados que las empresas remiten a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (hechos relevantes) o, al día siguiente, al informe de estadísticas de Bolsas y Mercados Españoles (BME).
Tanto en el caso de tener un terminal avanzado, como en el de acceder al boletín diario de estadísticas de BME, los registros indican en qué empresa qué dos brokers han realizado una operación de bloques, el precio al que la han realizado y el volumen de acciones que han cambiado de manos, junto con el importe correspondiente, pero nunca consta de parte de quién se ha realizado la operación (accionistas implicados).
¿Cómo se opera en el mercado de bloques?
Las operaciones del mercado de bloques se negocian en el SIBE (mercado continuo) en dos modalidades: bloques convenidos y bloques parametrizados.
- La modalidad de bloques convenidos se utiliza para comunicar bloques previamente casados entre los dos corredores implicados. El volumen debe ser superior a 600.000 euros y al 2,5% de la media diaria de contratación. Además, el rango de precios se calcula como el +/- 1% del precio medio de compra venta de ese valor (punto medio de la horquilla de la mejor posición de compra y venta de la Contratación General).
- La modalidad de bloques parametrizados se utiliza para negociar y comunicar bloques de acciones con una variación de precios del 15% respecto al precio de referencia. El volumen de estos bloques ha de ser superior al 5% del volumen medio de contratación diaria (VMCD) del valor de que se trate y a 1.200.000 euros.
Como se trata de un mercado donde las operaciones las realizan los corredores por mandato de accionistas, grandes empresas o firmas capaces de mover grandes volúmenes de acciones, no existe amplia información sobre la operativa a disposición del pequeño inversor. Son las firmas de corretaje las que tienen acceso a esta modalidad y las que conocen los pormenores de su funcionamiento.
Para los inversores minoristas no hay opción de saber en tiempo real qué se ha movido o de parte de quién. Sin embargo, tras una operación de este tipo, si ha habido movimientos accionariales a un precio distinto del mercado, el pequeño inversor puede observar cómo los títulos tienden a acercarse a los precios en los que se ha cerrado esa operación de bloques, llevada a cabo por inversores institucionales o de peso.
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