La semana no podía haber empezado peor para las bolsas europeas. Las caídas con las que ha abierto el mercado se han ido ampliando a lo largo del día, especialmente a raíz de la apertura en Wall Street. El principal detonante de la sesión ha sido China, donde la bolsa de Shanghai se ha dejado más del -8% esta madrigada, en lo que supone su mayor caída intradiaria desde hace siete años.
El Ibex, con pérdidas del -1,45% en la sesión (hasta los 11.145 puntos), ha sido de los índices europeos que menos ha sufrido. La peor parte se la han llevado las bolsas de Francia, Alemania o Italia, con descenso del -2,5% de media, ya que son mucho más sensibles a las oscilaciones de la moneda única. El euro ha subido con fuerza hasta el nivel de 1,11 frente al dólar, si bien el pasado viernes cerró en el 1,09.
El desplome del mercado chino de acciones se ha reactivado hoy. Tras algunas jornadas en las que las medidas del gobierno (suspensión de cotización de alguinios valores, aplazamiento de salidas a bolsas, etc…) parecían haber surtido efecto, hoy las bolsas de Shanghai, Shenzhen y Hong Kong han sufrido un fuerte revés.
La preocupación de que en China se frene la producción industrial se ha traslado a los mercados de materias primas, que temen que se reduzca la demanda de materiales del que es el principal importador del mundo. Ante esta posibilidad, se ha producido una caída generalizada de precios de los mismos, que ha encabezado el barril de Brent con una depreciación de cerca de un -1,5%.
El contexto económico mundial ha pesado más en el ánimo de los inversores que los buenos datos macroeconómicos y corporativos. La encuesta IFO alemana ha superado las expectativas al situarse en los 108 puntos (vs 107,2 estimado) en su vertiente de clima empresarial y en los 102,4 puntos (vs 101,8 estimado) la de expectativas a futuro.
También han sido positivos los resultados trimestrales de Philips y Bankia. La holandesa ha sido el único valor del Eurostoxx que ha logrado cerrar en verde, mientras que Bankia (+2%) ha sido de los pocos que ha hecho lo propio dentro del Ibex. El banco, del cual el Estado sigue poseyendo el 65% del capital, ha logrado incrementar en un 11% interanual su beneficio en el primer semestre.
En el mercado de deuda no se han producido variaciones significativas. La prima de riesgo española permanece en los 123 puntos básicos, con la rentabilidad del bono a diez años por debajo del 2%.
En Estados Unidos los inversores están esperando a que el miércoles Janet Yellen, presidenta de la Reserva Federal, pueda dar pistas sobre la subida de tipos en la comparecencia que tendrá lugar una vez finalice la reunión del banco central americano. Hasta entonces, las bolsas de Wall Street se han contagiado hoy del pesimismo generalizado y cotizan en rojo, con el Nasdaq (-0,80%) al frente de los recortes.