En el mundo de los mercados financieros se le denomina mercado FOREX al mercado en el que se negocian las operaciones entre las diferentes monedas que existen en el mundo. El volumen de dinero que se mueve en este mercado es de cerca de 1,5 billones de dólares diarios al día.
Desde el abandono del patrón oro y la adopción de los tipos de cambio flotantes, el mercado de divisas no ha dejado de crecer, en el que se llega a negociar en un día el mismo importe que se negocia en 16 días en los mercados de renta variable.
El mercado Forex es un mercado que está abierto las 24 horas del día y por lo tanto se pueden negociar divisas en todo momento acudiendo al mercado. Las bolsas mundiales más activas en la negociación de divisas son la bolsa de Londres, la de Nueva York, la de Tokio y la de Singapur, por ese orden. A su vez, las monedas que más se negocian en el mercado internacional de divisas son el dólar americano, el yen japonés, el euro y el franco suizo.
En el mercado de divisas interactúan multitud de agentes financieros, destacando de entre todos los siguientes:
– Por un lado, los bancos centrales, que acuden al mercado de divisas en ocasiones puntuales a comprar o vender divisas en función de las decisiones de política monetaria que estén llevando a cabo.
– Las instituciones financieras (bancos, fondos de inversión…) que acuden al mercado de divisas cuando realizan operaciones en divisa extranjera, como compra de acciones de países con una moneda diferente a la suya o para realizar cualquier tipo de transacción económica internacional.
– Los brokers que actúan como intermediarios en operaciones de compraventa de divisas.
El mercado forex es un mercado OTC, es decir, un mercado en donde las partes determinan entre ellas las condiciones del contrato y donde no existe cámara de compensación que vele por el cumplimiento de éste por parte de los dos participantes en la operación; con una enorme liquidez debido a su elevadísimo volumen de negociación, lo que lo convierte en un mercado enormemente atractivo para los inversores individuales que optan por una estrategia especulativa de corto plazo.
Durante los últimos años se ha popularizado este tipo de operativa en el mercado de divisas existiendo gran número de brokers que permiten a los inversores individuales la especulación en divisas a través de productos derivados apalancados, como pueden ser las opciones, los futuros o los CFDs.