Después de la tormenta siempre llega la calma. O al menos eso es lo que ha ocurrido en la apertura: bolsas europeas rebotando un +1,5% y pequeñas subidas en el precio del petróleo y en el dólar. Sin embargo, los inversores deben estar preparados para ver más episodios de volatilidad.
La sesión de ayer en Estados Unidos fue de las más movidas que se recuerda, y se saldó con caídas de casi el -4% para los principales índices: Dow Jones -3,5%, S&P -3,9% y Nasdaq -3,8%. No obstante, los descensos llegaron a alcanzar en la apertura el -6% en el Dow y el -8% en el Nasdaq.
El desplome de los precios de las materias primas a raíz de China va a tener un efecto a la baja en la inflación, que es una de las grandes preocupaciones de la Reserva Federal. Es por ello que el mercado está descontando un retraso en la subida de tipos, por lo que salvo sorpresa este movimiento no se producirá en la reunión del 17 de septiembre. Ante este cambio de expectativas, el eurodólar llegó a tocar ayer el 1,17, si bien cotiza en estos momentos en el 1,15.
Esta madrugada las bolsas asiáticas han seguido sufriendo los efectos del pesimismo desatado ayer. Las bolsas locales de Shanghai y Shenzhen se han dejado otro -7%, con el Nikkei japonés perdiendo un -3,9% y el Hang Seng subiendo un leve +0,6%.
Transcurrida cerca de una hora de negociación, el Ibex-35 sube un +1,85%, siendo buena parte de los valores que más cayeron ayer, los que lideran hoy al selectivo. Abengoa repite como valor más alcista (+6,4%), seguida por Gamesa (+3,4%), IAG (+3%) y Arcelormittal (+2,5%).
Los mercados de deuda siguen mostrando la tranquilidad que también registró ayer. La prima de riesgo se mantiene en zona de 140 puntos básicos y la rentabilidad del bono español a diez años cerca del 2%. El Tesoro tiene prevista una subasta para el día de hoy.
A nivel macroeconómico, hemos contado con varias referencias provenientes de Alemania. Tal y como se esperaba, en el segundo trimestre su PIB avanzó un +0,4% respecto al primero, y un +1,6% respecto al segundo trimestre del año pasado, apoyado especialmente por el nivel de exportaciones, que crecieron más de lo esperado: +2,2% vs +1,8% estimado.