Aunque suene a nombre español, Ester es una creación europea, concretamente del Banco Central Europeo. Se trata de una nueva tasa de interés que servirá de referencia sin garantías a un día del euro, un indicador sobre el mercado interbancario europeo, acrónimo de Euro Short-Term Rate.
Ester viene a sustituir al Euro Overnight Index Average (Eonia) que ha sufrido, lo mismo que su hermano, el euríbor, una pérdida de confianza de sus usuarios europeos, tras una serie de presuntas manipulaciones por parte de la industria, con grandes bancos de inversión acusados de distorsionar estas referencias en beneficio propio.
Adiós Eonia
Ester nace con el objetivo de facilitar más información y elevar la transparencia del mercado monetario europeo para lo que reflejará las transacciones que se produzcan en este mercado y recogerá así información estadística sobre los mercados monetarios (MMSR, en sus siglas en inglés) que faciliten los propios bancos.
Más en concreto, el nuevo tipo de interés del BCE, se basará en los datos facilitados por 52 bancos informantes, aunque esta cifra podría aumentar antes de final de 2018.
Según el BCE, el Eonia recoge sólo operaciones a un día mientras que el euríbor tenía varios vencimientos (un mes, tres meses, seis meses o doce meses). Además, sólo se crea con operaciones realizadas entre entidades, y no con datos sobre precios ofertados entre ellas, como sucede en el euríbor.
Pre-Ester ya está en marcha
Con el fin de que los mercados y usuarios se vayan adaptando a este nuevo indicador, la entidad ha decidido empezar a publicar Ester durante 2019, desde octubre. Así, cuando el Eonia desaparezca en 2020, su sustituto ya tendrá más reconocimiento entre los operadores del mercado.
Para que el Eonia tenga un histórico de operaciones, el BCE ha recogido datos anteriores y ha aplicado sobre ellos la metodología que piensa aplicar en él. Estas cifras abarcan operaciones desde mediados de marzo de 2017 y hasta el mes de mayo de 2018.