Ni de Trump ni del precio del petróleo, de lo que más se está hablando en bolsa últimamente es de rotación sectorial.
Este fenómeno está provocando que los inversores estén cambiando sus posiciones en bolsa desde acciones de empresas defensivas hacia sectores más ligados a la recuperación económica.
¿Por qué sucede esto?
Principalmente por la mejora de las perspectivas macroeconómicas y porque los inversores se están anticipando a posibles movimientos del Banco Central Europeo. A medida que crece el IPC (que en España ya está en el 3%), también lo hacen las expectativas de retirada de estímulos y de subida de los tipos de interés.
¿Cómo afecta una subida de tipos a la bolsa?
Depende del tipo de empresa. Es bueno para algunas compañías y malo para otras.
Por ejemplo, los bancos se están frotando las manos ante esta posibilidad porque si sube el Euribor, también lo hará el dinero que cobran por el crédito.
En cambio, las compañías que están muy endeudadas sufrirían si se produce una subida en los tipos de interés ya que cuando tengan que refinanciar su deuda tendrán que pagar más a sus acreedores.
Un ejemplo de lo que podría ocurrir en la Eurozona es lo sucedido en las bolsas americanas desde abril de 2013. En aquella época las expectativas de retirada de estímulos y subida de tipos eran similares a las que vivimos hoy día en la zona euro. Aunque el inicio de la retirada del programa de compra de activos de la Fed (QE3) no se produjo hasta diciembre de 2013, los meses anteriores ya se empezó a barruntar esta posibilidad:
En el gráfico se puede apreciar cómo desde entonces se han comportado mejor sectores como el de industria y el consumo cíclico respondiendo a la mejora de los datos económicos. También el financiero, cuyas subidas en bolsa se empezaron a producir incluso varios meses antes de que la Fed subiese los tipos de interés.
Sin embargo, han tenido peor comportamiento las empresas de sectores de consumo defensivos como las alimentarias y la consideradas Utilities, entre las que se encuentran las eléctricas.
Esto nos lleva a una reflexión y es que el éxito en Bolsa suele depender más de la elección de los sectores en los que invertir, que de la selección de empresas concretas.
Dicho lo cual, quizá te interese darle a una pensada a tu actual cartera y anticiparte ante un escenario de estas características en Europa.
Esta es una labor que puedes hacer tú directamente mediante acciones y ETF, o confiarle tus ahorros a un gestor profesional de algún fondo de inversión con la capacidad de analizar estas circunstancias.