Con el buen tiempo y las vacaciones aumentan las ganas de viajar, y una de las opciones que está ganando más adeptos es la del caravaning. ¿En qué consiste y qué ventajas ofrecen las autocaravanas? ¿Por qué se ha vuelto a poner de moda?
Qué es el caravaning
El caravaning es el nombre que se utiliza para hacer referencia a los viajes con «la casa a cuestas», utilizando una caravana, autocaravana, roulotte, las furgonetas camper (o campervan) y vehículos similares.
Esta manera de viajar es centenaria. Ya en el siglo XIX la usaban algunas personas, en carros todavía tirados por caballos; en 1907, el doctor William Gordon se convirtió en presidente del primer club de caravanas británico, en un principio formado por personas con un elevado nivel adquisitivo.
Posteriormente, con la llegada de los vehículos a motor, surgirían las caravanas tiradas por un coche (tipo roulotte) y las autocaravanas, que cuentan con su propia propulsión, con la ventaja de que se pueden aparcar como un vehículo convencional, en cualquier sitio, siempre y cuando no se desplieguen otros elementos a su alrededor.
El auge del caravaning
En los años cuarenta, la moda llegaría a Estados Unidos, donde se popularizó esta forma de viajar, para poder viajar por diversos lugares y disfrutar de unas vacaciones económicas.
En España comenzó a verse en los años cincuenta en Cataluña, gracias a su situación fronteriza con el resto de Europa, a donde llegaban campistas de otros lugares; posteriormente, en los 60 y los 70 se fue extendiendo por el resto del país.
En las siguientes décadas, con la mejora de la economía y el ascenso de la clase media, muchos comenzaron a decantarse por otras formas de viajar (hoteles, apartamentos, viajes organizados, etcétera), provocando que el sector declinara un poco.
Sin embargo, en los últimos tiempos ha vuelto con fuerza, con un importante crecimiento en la última década. Según los datos de Aseicar (Asociación Española de la Industria y Comercio del Caravaning), en España se rondan las 9.000 matriculaciones al año (en su mayoría, autocaravanas), cifras que multiplican por 7 las 1.293 que hubo en 2013. Este auge se debe a varios motivos:
Los famosos también las utilizan
Algunos famosos se han apuntado a esta tendencia —o incluso ayudan a crearla—, que permite viajar con libertad, pero también con muchas comodidades. En estos casos, se suele tratar de auténticos motorhomes o casas rodantes, habitualmente autobuses convertidos en vivienda con todas las comodidades, que pueden valer cientos de miles de euros o incluso varios millones, dependiendo de las prestaciones que incorporen sus interiores.
Mejor habitabilidad
Sin llegar al nivel de las anteriores, muchas autocaravanas de hoy en día ofrecen una gran habitabilidad, muy superior a la que tenían hace años, con longitudes superiores a los 7 metros y diversos elementos de confort, que proporcionan una gran comodidad a sus usuarios, con precios que pueden superar los 100.000 euros.
Compartir las vacaciones
Las caravanas son una buena forma de compartir las vacaciones con la familia y con los seres queridos; según un informe de la Fira de Barcelona, que organiza el Salón Internacional del Caravaning, el 58% de los usuarios viaja en familia y el 42% en pareja.
Máxima libertad
Las caravanas proporcionan una gran libertad a sus usuarios, que pueden desplazarse a donde quieran, sin tener que estar «atados» a un hotel o una localización concreta durante sus vacaciones. La pandemia del COVID-19 ha supuesto un catalizador en este sentido, ya que el uso de la caravana permite disfrutar de lugares menos concurridos y mantener la distancia de seguridad con otras personas.
Comprar o alquilar una caravana y segunda mano
La compra de una caravana o de una autocaravana supone un desembolso importante, que puede ir desde unos 12.000 euros en el caso de una caravana tipo roulotte hasta más de 100.000 para una autocaravana. Es un vehículo que no se usa posiblemente durante buena parte del año, por lo que hay que sumar el coste de mantenimiento y estacionamiento. Y cabe la posibilidad de que en el futuro los usuarios cambien de gustos y ya no lo disfruten como antes.
El alquiler de un vehículo para caravaning —dependiendo del tamaño y las comodidades que incluya— puede salir más caro que un hotel o un apartamento. Como orientación, en temporada alta puede ir desde unos 100 euros diarios hasta más de 500. Pero proporciona una mayor libertad a sus usuarios y una manera diferente de vivir sus vacaciones.
Mercado de vehículos usados
Otra alternativa económica para hacerse con un vehículo de este tipo es la de los vehículos usados, un mercado en auge que en el año 2020, según los datos de la asociación del sector, significó la matriculación de más de 16.000 vehículos de segunda mano, más de un 60% superior a la de los vehículos nuevos.