Tras meses de dedicación al trabajo nos merecemos unas vacaciones. Si como ahorradores nos hemos esforzado todo el año para optimizar nuestra economía doméstica, ahora que se acerca el verano, el reto es otro: maximizar ocio y descanso y minimizar el presupuesto. Los días de vacaciones disponibles y los elegidos para viajar son clave en este reto veraniego.
Según los últimos datos de la encuesta de turismo de residentes elaborada del INE, los españoles realizamos un total de 182 millones de viajes en 2016, de los que tan solo el 8,6% fueron al extranjero. Lo que denota que España tiene encanto turístico suficiente para absorber la inmensa mayoría de viajes, pero también que no es sencillo cuadrar varios días o semanas seguidas de vacaciones y un viaje al extranjero a precios asequibles.
Planificar las vacaciones para que compense el viaje
En la fase de planificación del viaje es fundamental conocer cuántos días y en qué fechas nos podremos tomar vacaciones, revisar el estado de nuestra cuenta corriente y elaborar un presupuesto vacacional en una hoja de Excel para cada posible destino. En ese punto es conveniente desglosar los gastos vacacionales que tendremos que afrontar en cuatro bloques:
- Desplazamiento
- Alojamiento
- Comidas
- Gastos diarios corrientes (entradas, transporte en destino, visitas, regalos, etc.)
Con esos cuatro conceptos bien definidos comenzaremos a asignar costes estimados basándonos en guías de viajes, experiencia previa, recomendaciones de familiares, amigos, otros viajeros, guías, blogs de viaje y, lo más importante, buscando en Internet el precio de billetes de avión y hoteles en las fechas de nuestras vacaciones. Con un tour organizado por agencia se simplifica la fase de planificación, pero esa facilidad acaba saliendo cara.
Sumando esos bloques podemos aproximar cuánto nos costará viajar a cada destino. Será el momento de preguntarnos si es viable para nuestra economía familiar y si compensa para los días de vacaciones que tenemos disponibles.
Cuántos días irme de vacaciones si el desplazamiento es lo más caro
Volviendo a la hoja de Excel con el presupuesto vacacional, observamos que a mayor número de días de vacaciones, mayor desembolso; es lógico. Sin embargo, hay una celda con un importe que destaca sobre las demás: el precio del avión, tren, barco o gasolina para llegar a nuestro destino.
Es posible reducir los gastos diarios eligiendo hoteles y restaurantes más básicos y disminuyendo los gastos corrientes, pero el precio del billete de avión seguirá presente engordando la media diaria, y lo hará más a menor número de días en el destino.
Sabiendo que el precio del billete de avión es fundamental para elegir si compensa o no un destino en función del número de días, es importante considerar que:
- En temporada alta (período de vacaciones en el hemisferio norte) se disparan los precios conforme nos acercamos al verano,
- Adelantarse mes y medio a la fecha de reserva es la clave.
- Las combinaciones aéreas con escalas pueden reducir el coste del desplazamiento, pero también el tiempo disponible en el destino.
- El desplazamiento resta al menos dos días al viaje. Desde que salimos de casa hasta estar instalados en la habitación del hotel transcurre al menos un día y desde el check-out hasta que volvemos a casa.
Y si lo caro es el hotel o el coste de vida en vacaciones
Si seguimos los consejos de ahorro en viaje del blog de Self Bank, es muy probable que, adelantándonos a los tiempos definidos por las aerolíneas, encontremos billetes de avión muy económicos. Entonces, la decisión final desde el punto de vista económico, vendrá marcado por el coste de vida en vacaciones (comidas, gastos diarios) y, especialmente por el precio de cada noche de hotel.
Con períodos de vacaciones habitualmente cortos (y siempre más cortos de lo que nos gustaría), la elección de un alojamiento cómodo determinará nuestro presupuesto. Y según en qué ciudad y país un alojamiento acorde con nuestras preferencias incrementará significativamente el desembolso final.
Cuántos días tengo que estar de vacaciones para que compense
Hemos visto que el desplazamiento y el alojamiento son los factores fundamentales que van a influir en el número de días, donde nos encontraremos en una situación comprendida entre:
- Vuelo caro en destino barato: perfecto para vacaciones largas (3-4 semanas).
- Vuelo barato en destino caro: perfecto para vacaciones cortas (1 semana).
Es útil la idea de pensar en las vacaciones como una inversión más. Dedicamos parte del ahorro doméstico a un destino y esperamos que su rentabilidad sea máxima, con una diferencia, aquí no se cuenta el resultado en euros, sino en satisfacción, en haber cumplido las expectativas del viaje y en regresar con energía renovada.
Analizando todas las opciones y pensándolo con tranquilidad, ¿no será mejor dejar esta corta semana de vacaciones para un lugar más cercano y barato y reservar ese ahorro para el año que viene, con la intención de dejar más días de vacaciones para el verano?
Cuántos días de vacaciones necesito para desconectar
Un último punto, no menos reseñable, es el número de días que cada persona necesita para desconectar, refiriéndonos con ese término a disfrutar del destino y descansar para volver con las baterías cargadas.
Es otra variable que cada ahorrador debería incluir en su planificación viajera, vinculado a su capacidad económica. En ese aspecto, un vuelo de 1.000 euros para una semana en destino puede ser adecuado para unos y un desacierto completo para otros. Pero así son los viajes y la economía personal, ¡para hacerlo a tu manera!