Todos sabemos que en algún momento la bolsa bajará. No sabemos ni cuándo, ni cómo, ni cuánto… ni siquiera si será por debajo de los niveles actuales. Pero lo cierto es que los mercados funcionan gracias a la volatilidad, y como dice el refrán popular “todo lo que sube, baja”. Lo que no todos los inversores conocen es que es posible ganar dinero cuando un activo baja.
La dinámica fundamental del mercado de valores es que podemos comprar acciones de empresas u otros activos. Si el precio de estos activos sube, los vendemos y hemos generado un beneficio. Si baja y vendemos más barato de lo que hemos comprado, terminaremos con menos dinero que en el inicio. Hasta aquí todo muy elemental. Pero, ¿cómo es posible ganar dinero cuando algo baja de precio? Hay diversas maneras de tener exposición a la baja, unas más complejas que otras.
Todas las estrategias bajistas requieren de un poco más de sofisticación por parte de los inversores, ya que a veces las implicaciones de las posiciones son complejas y debemos estar familiarizados con su funcionamiento. Aparte de la flexibilidad que aporta el poder invertir a la baja para nuestras estrategias individuales, en conjunto las posiciones bajistas hacen que el mercado sea más eficiente a muchos niveles.
Venta de acciones en corto
La forma más básica de generar beneficios cuando una cotización baja es vender en corto esa acción (short sell en inglés). Lo que realmente hacemos cuando vendemos en corto una acción es pedir prestadas las acciones a un tercero para poderlas vender en el mercado. Si el precio baja, podremos recomprar posteriormente las acciones más baratas y devolverlas a quien nos las ha prestado. Nuestro beneficio será la diferencia entre el precio por el que las vendimos y el precio por el que las (re)compramos, a lo que también deberíamos restar el tipo de interés que se paga al que nos ha prestado las acciones.
Todo el proceso de préstamo de las acciones es gestionado por nuestro bróker, que se ocupará de exigir unas garantías para asegurar la devolución de los títulos al prestamista.
Consideraciones a la hora de vender en corto una acción:
- Las pérdidas hipotéticamente son ilimitadas ya que el precio en teoría puede subir hasta el infinito (obligándonos a comprar a precios elevadísimos). En la práctica el bróker controla que podamos hacer frente a la recompra futura exigiendo garantías. En caso de no contar con las garantías requeridas, es posible que el bróker proceda al cierre forzoso de la posición. En Self Bank es posible realizar esta operativa mediante la cuenta Quintuplica y la cuenta Tentuplica (6/6 Este número es el indicativo del riesgo del producto, siendo 1/6 indicativo de menor riesgo y 6/6 de mayor riesgo. Producto financiero que no es sencillo y puede ser difícil de comprender).
- Incurriremos en un coste de alquiler sobre las acciones al tomarlas prestadas, ya que el prestamista exigirá un interés a cambio de los títulos.
ETF inversos
Los ETF son fondos cotizados que replican índices. Dentro de la amplia variedad de ETF existen los denominados ETF inversos, que replican a la inversa el comportamiento de un índice. Como principales ventajas encontramos que la posible pérdida queda limitada al capital invertido, así como la relativa sencillez con la que se negocia, ya que su negociación se realiza de forma similar a la de las acciones. La operativa se realiza mediante una cuenta de valores.
Por ejemplo, si creemos que el Ibex va a bajar, podemos comprar algún ETF inverso como el Lyxor Ibex 35 Inverso Diario UCITS ETF (ISIN FR0010762492). De esta manera si el índice baja un 1%, nuestra inversión subirá un -1%. De igual modo, si el Ibex sube un 0,50%, nuestra inversión bajará en la misma proporción.
Venta de futuros
Mediante contratos derivados como los futuros podemos estructurar posiciones para ganar dinero si el precio de un activo baja. Un futuro es un contrato mediante el cual dos partes se comprometen a intercambiar un activo por un precio determinado en una fecha futura.
Los futuros, al ser un contrato entre dos partes, necesitan de un comprador y un vendedor. Lógicamente uno va a ganar dinero si el precio del activo sube de aquí a la fecha final del futuro, y otro perderá dinero. Por tanto vender un futuro sobre una acción suele ser una forma de ganar dinero si la acción baja de precio, ya que de una manera u otra terminaremos comprando el activo por un precio más bajo del que lo compramos.
Consideraciones a la hora de vender futuros:
- Los futuros son instrumentos apalancados que nos permiten comprometernos por mucho más dinero del que tenemos. Esto nos puede dar una rentabilidad mucho más elevada, pero también puede producir pérdidas mucho más fuertes en términos porcentuales de nuestro capital.
- La liquidación de garantías se produce de forma diaria, y debemos monitorizar siempre que disponemos de las garantías adecuadas para mantener nuestra inversión, ya que de lo contrario se producirá el cierre forzoso de posiciones.
CFDs
Los CFDs (Contratos por diferencias) son transacciones donde se acuerda entre dos partes el pago de la diferencia entre el precio de compra y el precio de venta de un activo, sin llegar a tener ese activo en ningún momento. El CFD toma como referencia el precio del activo que replica, es decir, si una acción cotiza a 10 €, el CFD sobre esa acción cotizará a un precio muy próximo a esos 10 €.
Estos instrumentos financieros permiten tomar tanto una posición alcista como bajista, ya que podemos vender en corto el CFD, beneficiándonos si cae el precio del activo al que replica.
Los CFDs no requieren el desembolso del total del efectivo, sino únicamente de un porcentaje a modo de garantía, lo que dota al instrumento de apalancamiento. Este apalancamiento puede producir mayores ganancias que si el inversor opera únicamente con su propio efectivo, pero también pérdidas superiores si el activo al que replica el CFD se mueve en su contra, pudiendo incluso ser superiores al capital inicial desembolsado.
Warrants
Los warrants son productos cotizados que dan el derecho a comprar (warrant call) o vender (warrant put) un activo hasta una fecha futura a un precio fijo (denominado strike o precio de ejercicio). El inversor paga una prima a cambio de este derecho, siendo esta prima el importe máximo que puede llegar a perder.
Por tanto, para posicionarnos bajistas mediante este producto, compraríamos un warrant put. Es importante destacar que proporcionan apalancamiento, si bien la pérdida está limitada al capital incialmente desembolsado.
Conclusión
Existen en el mercado múltiples formas de beneficiarnos cuando un activo baja de precio, ya sea el precio de una acción, de una materia prima o la cotización de un índice. Utilizar uno u otro en nuestras estrategias dependerá de nuestro grado de conocimiento y de la estrategia que estemos intentando implementar. Este tipo de herramientas se pueden utilizar de manera extremadamente conservadora, como por ejemplo para realizar una cobertura de una parte de la cartera.
También pueden utilizarse de manera muy arriesgada ya que conllevan un grado importante de apalancamiento. Su buen uso dependerá de adecuarlo a la estrategia que estemos intentando implementar. Ampliando bien nuestro conocimiento y experiencia con estas herramientas, podemos mejorar y ampliar el tipo de estrategias en nuestro repertorio inversor. Ten en cuenta que los productos aquí mencionados son productos complejos y no son aptos para todos los inversores, y su operativa requiere los conocimientos y experiencia necesarios.