Las leyendas sobre Warren Buffett darían para escribir un libro, aunque en realidad ya hay publicados decenas de ellos. Empresario, inversor, filántropo… Existen muchas posibilidades para definir una de las figuras económicas más importantes del siglo XX y parte del XXI, aunque en este caso nosotros le vamos a utilizar para entender sus consejos en forma de ahorro.
Pese a que su vida ha estado rodeada de dinero, hay mitos en torno a su persona que nos pueden servir de ejemplo. De hecho, siempre se ha comentado que desde los años 50 vive en la misma casa o que apenas tiene un sueldo de 100.000 dólares al año, aunque lógicamente tiene otras vías de ingreso.
Bajo este prisma, vamos a coger cinco de sus mejores consejos sobre finanzas e inversión y les daremos la vuelta para verlo desde el punto de vista del ahorro familiar. Tomad nota.
Obtención de préstamos con prudencia. Siempre es mejor disponer del dinero de uno mismo
Este consejo valdría para la sociedad en su conjunto, aunque obviamente no siempre es posible. Empresas, inversores y familias. Pero en nuestro caso particular, el de las familias, pone de manifiesto uno de los grandes males que nos ha perseguido durante la crisis económica: el endeudamiento.
Las familias deben 745.793 millones de euros a las entidades financieras. Puede que para una empresa sea un “mal necesario” para su funcionamiento cotidiano o de cara a ampliar sus líneas de negocio. Pero en una familia puede convertirse en un camino sin retorno si no se valora bien la capacidad para ir devolviendo esa deuda. Por lo tanto, de estas palabras de Buffett hay que tomar la esencia de manera estricta.
Con la cantidad de gastos recurrentes que hay en el ámbito familiar: recibos de luz, teléfono, gas y agua; diversos seguros (casa y coche), gasto cotidiano en alimentación, ocio…, parece obvio que el endeudamiento, con el añadido pago de intereses, debe ser una partida de gastos que debe minimizarse en la medida de lo posible. Más si cabe si no todos los miembros tienen empleo.
Antes de comprar algo piense, ¿qué pasaría si no lo comprase? Si la respuesta es nada, no lo compre. Además, no pida consejo a un peluquero sobre si necesita un corte de pelo
Aquí hemos puesto dos consejos en uno, aunque su aplicación práctica para el ahorro es la misma. Un ejemplo sucede en estos momentos con las nuevas generaciones de televisores inteligentes. ¿De verdad necesitamos una Smart TV de 48 pulgadas con pantalla curva? Es decir, si en nuestra casa disponemos de un televisor con pantalla plana de 36 pulgadas, que sería un estándar de consumo, lo que nos viene a decir Warren Buffett es que siempre vamos a creer que algo nuevo, más grande y más caro será mejor, pero ¿lo necesitamos en realidad?
Y no solo eso. Como dice en el ejemplo, si preguntamos al peluquero, su respuesta será muy lógica. Asimismo, si preguntamos en nuestro entorno o si nos acercamos a una gran superficie de consumo, claro que nos harán creer que los 800 o 1.000 euros de esa Smart TV son una inversión. Pero no nos recuerdan que los contenidos que habrá dentro del aparato se verán casi igual que en nuestro televisor y no van a variar los goles de Messi y Ronaldo por más pulgadas que tenga. Además, siempre hay que estar al tanto de la devaluación del precio cuando surgen nuevos productos, por lo que la paciencia es una virtud para ahorrar.
Reinvierte tus ganancias. Cuando ganes dinero por primera vez en el mercado de valores, o en cualquier otro sitio, puedes tener la tentación de gastarlo. No lo hagas
Claro, conciso y directo a la línea de flotación del ahorro. De nuevo, Buffett habla al inversor como lo podría hacer a cualquier padre o madre de familia. Este ejemplo puede aplicarse a las pagas extras de Navidad o verano (quien todavía las mantenga). Son fechas de consumo y gasto, pero si miramos los periodos que vienen después (“vuelta al cole” y “cuesta de enero”), parece lógico que ese “sueldo” debería traducirse en gasto corriente.
Libros, ropa nueva (en caso de tener hijos), o cuota de gimnasio… En este caso no hablamos de una reinversión, sino de un ahorro directo para el consumo más próximo a ese “exceso” de ganancias. Un dato que aporta la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), calcula en torno a los 1.200 euros el gasto en septiembre de la temida “vuelta al cole”. Casi una nómina, o lo que es lo mismo, una paga extra.
Cuida los pequeños gastos. Invierte en empresas dirigidas por gerentes que cuidan hasta los gastos más pequeños, como el papel higiénico
Este es otro de los mitos que rodea al empresario estadounidense, pero igualmente retrata esta lista de consejos aplicados al ahorro familiar. Cuántas veces hemos ido al supermercado y al pasar por la sección frutos secos y patatas fritas hemos cogido la primera bolsa que había a nuestro alcance. O en un restaurante, cuando el camarero hace una sugerencia y lo aceptamos sin pensar en nada.
Ese tipo de pequeños gastos son los que condicionan una mayor capacidad de cara al ahorro. De cuando en cuando, las organizaciones de consumidores elaboran listas de compra con las diferencias de hacerlo en un establecimiento u otro. En ocasiones hablan de hasta 300 euros anuales de ahorro dependiendo del lugar. Lo mismo sucede con el auge de los comparadores de seguros o tarifas móviles, que en muchos casos advierten de un ahorro superior a los 200 euros al año.
Por lo tanto, en la renegociación del seguro del coche, estad atentos a la letra pequeña de los datos móviles (internet) de nuestra tarifa. En todo lo que creamos que “son solo un par de euros más” puede estar la clave para estar “siempre en verde”.
Sepa lo que significa realmente el éxito. No se puede hacer un buen negocio con malas personas
Porque no todo en la vida es dinero, Warren Buffett ha predicado otros conceptos que han derivado en su función filantrópica. Si finalmente conseguimos ahorrar y no tenemos necesidades más acuciantes, podemos tomarnos dos minutos para reflexionar qué queremos hacer con ese dinero. Está claro que podemos invertir, pero el abanico es amplio. Sí, puede ser en acciones o en fondos de inversión. Pero….¿y por qué no en educación, cultura, deporte…? Esto último supone valorar que ese dinero que hemos conseguido no solo sirve para arroparnos con cosas materiales, sino que el dinero debe darle un significado real a nuestra vida.
Asimismo, debemos saber con quién compartir nuestro dinero, cuando sea poco o mucho. Buffett siempre lo ha sabido hacer y no le ha ido del todo mal. Analicemos sus consejos y pongamos todo en práctica.