El coronavirus ha ocasionado no solo una crisis sanitaria con pocos precedentes, sino también una crisis económica, en un momento en el que apenas habíamos salido de la Gran Recesión. En el siguiente post hablaremos sobre reinventarse en tiempos de COVID-19.
Muchas empresas ven peligrar no solo las cifras a corto plazo, sino incluso su viabilidad, ya que podrían verse abocadas al cierre. Mientras, algunos sectores han conseguido incluso repuntes de la actividad durante esta crisis, o han sabido reinventarse o adaptarse rápidamente a las circunstancias, manteniendo en cierta medida el empleo o incluso aumentándolo. Te contamos algunos ejemplos.
Supermercados y ventas online: el caso de Día
Uno de los sectores que ha visto aumentar sus ventas durante esta crisis del COVID-19 es el del gran consumo. Supermercados, hipermercados y tiendas de alimentación en general, han visto cómo la gente se lanzaba a comprar —e incluso acaparar— determinados productos. Concretamente, según datos de Kantar Media, en la semana del 9 al 15 de marzo, la del inicio del confinamiento, se produjo un aumento del 21% en el gasto semanal.
Aunque la situación se ha normalizado con el paso de las semanas, el consumo medio en alimentación y droguería sigue siendo elevado, y esto ha permitido revitalizarse a Día, una compañía que acumulaba ejercicios con diversos problemas.
Día es uno de los principales actores en el sector de la alimentación en nuestro país, con más de 4.000 tiendas en España entre establecimientos propios y franquicias, y más de 6.000 contando las que tiene en Portugal, Brasil y Argentina.
Tras salir a bolsa en 2011, en 2012 entró en el IBEX 35, donde permaneció hasta 2018, momento en el que la crisis le había llevado a perder un 90% de su cotización. En mayo de 2019, el grupo LetterOne, controlado por el ruso Mijail Fridman, se hizo con la mayoría de la compañía a través de una OPA, cuando estaba a punto de verse abocada a un concurso de acreedores.
La mejora de Día en las últimas semanas no tiene que ver únicamente un aumento del gasto medio por parte de los consumidores. La compañía también ha realizado acciones para revitalizar su actividad, y una de ellas tiene que ver con el aumento de la compra online.
Día ha llegado a un acuerdo con Glovo, que permite acceder a una amplia gama de productos de forma rápida. Este acuerdo se une al que había firmado con Amazon Prime Now. Sin duda, la compañía está aprovechando el auge de la compra a través de Internet para incrementar sus ventas.
Como consecuencia, las acciones de Día han tenido una fuerte subida que le han llevado a duplicar su valor en pocos días, y el grupo ha contratado a 1.000 personas para gestionar el incremento de la demanda ocasionado por esta línea de negocio en auge.
Una línea de negocio que muchas empresas deberán explorar a partir de ahora con más intensidad; si el incremento del comercio electrónico ya era una tendencia desde hace años, posiblemente esta crisis la acentúe todavía más.
También es un aspecto a considerar por parte de los inversores: compañías relacionadas con el comercio electrónico o que apuesten decididamente por él, pueden ser las ganadoras en los próximos años.
El distanciamiento social
Un área que estará en auge en los próximos tiempos a causa del coronavirus es la relacionada con la distancia social. Lo vio claro un empresario murciano del sector de la publicidad, dedicado a la realización de rótulos y carteles.
Al principio de la pandemia, y cuando aún no se habían generalizado las diversas medidas para el distanciamiento entre personas, decidió cambiar su modelo de negocio, orientándolo a la fabricación de mamparas.
Inicialmente, vendió más de 200 mamparas por toda la provincia, a diversos establecimientos considerados esenciales (supermercados, farmacias, estancos…), y pronto comenzó a recibir pedidos de todo el país. Sus seis empleados también tuvieron que reinventarse, aprendiendo a manejar la máquina láser para cortar las mamparas.
Se ha generalizado en establecimientos de hostelería, o incluso en las playas, donde también hay propuestas en este sentido, podrían hacer de este un sector boyante.
La higiene y la protección personal
Muchas empresas del país han reconvertido su producción para pasar a fabricar elementos relacionados con la higiene y la protección personal. Transiciones más o menos sencillas en el caso de factorías textiles, o más complejas, como la fabricación por parte de SEAT de respiradores para las UCI, de los que llegó a entregar más de 500 unidades.
En este apartado, llama la atención la propuesta de una compañía orensana dedicada a la transformación de contenedores marítimos, para su uso como casetas en stands de ferias o incluso como viviendas por módulos.
La necesidad de crear un entorno libre de infecciones para los sanitarios o para los trabajadores de servicios esenciales llevó a esta empresa a diseñar un contenedor que, a modo de túnel de lavado de automóvil, permite desinfectarse a las personas, incluyendo medición de temperatura, limpieza específica de manos, un pasillo de nebulización que desinfecta globalmente por vaporización, y limpieza de la suela de los zapatos mediante una solución acuosa.
Teletrabajo y atención a distancia
El teletrabajo tiene sus ventajas; se ahorran el tiempo y el dinero dedicado a los desplazamientos, pero también requiere cierta infraestructura y disciplina a la hora de trabajar.
Con la irrupción de la crisis del COVID-19 muchos trabajadores han tenido que adaptarse al teletrabajo en un tiempo récord, y los que han podido y han sabido hacerlo pueden obtener ventajas no solo en la situación actual, sino también en el futuro.
Con esta nueva forma de trabajar, empresas en las que antes había mucho contacto con los clientes, como asesorías, estudios de arquitectura, o incluso clínicas, pueden atender en muchos casos a sus clientes vía online, ahorrando mucho tiempo, de manera que pueden atender a más gente, obtener más beneficios o repercutir el ahorro a sus clientes.
Derivado de este auge del teletrabajo, han repuntado las compañías relacionadas con las videoconferencias, un aspecto que puede ser tenido en cuenta a la hora de invertir. A modo de ejemplo, una de las más conocidas, Zoom Video, pasó de cotizar a 68 dólares a principios de año a 169 el 23 de abril.
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