En épocas de petróleo caro resuena con más fuerza el coche eléctrico como alternativa para nuestro próximo automóvil. En los últimos años el coche híbrido ha logrado hacerse un hueco en el mercado automovilístico y el eléctrico se ha ganado sus primeros adeptos. Aunque desde el punto de vista ecológico el vehículo eléctrico es la mejor opción, ¿lo es también para nuestro ahorro? ¿Cuánto cuesta cargar un coche eléctrico?
Las cifras del negocio del automóvil en España.
La cifra de ventas de coches nuevos se disparó en 2018 por la urgencia de los concesionarios para desprenderse del stock de vehículos homologados bajo NEDC, lanzando agresivas ofertas antes de la entrada en vigor, en septiembre, del nuevo protocolo WLTP (Procedimiento Mundial Armonizado para Ensayos de Vehículos Ligeros). La llegada del nuevo estándar, más exigente con las emisiones, ha restado ventas de modelos diésel, en favor de los gasolina.
En total, en 2018 se vendieron 1.321.438 automóviles, un 7% más que en 2017. De ese casi millón y medio de unidades, solamente 13.882 fueron eléctricos según la ANFAC (Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones). Lo que implica que, en términos porcentuales, el coche eléctrico en España todavía tiene una cuota de mercado prácticamente testimonial, con un 1,05% del total de ventas. En cuanto al vehículo híbrido, se pusieron en circulación 76.112 unidades, lo que representa el 5,75% del total.
A pesar de que los números son todavía bajos, si los comparamos con el año anterior, queda claro que los vehículos totalmente eléctricos y los híbridos han ganado adeptos, con un aumento del 61% y del 36,5% respectivamente.
¿Es momento de comprar un coche eléctrico?
Comprar un coche nuevo es uno de los mayores desembolsos de la economía familiar, una enorme inversión, que influirá en nuestras finanzas de los próximos años (piensa en 8-10 años como mínimo). De partida, habría que plantearse si realmente conviene, desde el punto de vista del ahorro, adquirir uno en propiedad, o si el renting y las otras soluciones de movilidad alcanzan para cubrir nuestras necesidades de transporte.
Los datos antes mencionados demuestran que, aunque la tendencia es creciente, todavía pocos españoles se apuntan al coche eléctrico. Que sea una tecnología nueva, que la autonomía no sea suficiente para todos los usuarios, las dudas con la recarga, y su precio más elevado son, para muchos, motivos de peso para esperar unos cuantos años. Sin embargo, si comparamos su consumo y tomamos las decisiones acertadas, a largo plazo, movernos en coche eléctrico puede salir más barato que en un coche de combustible fósil.
Mientras los gobiernos europeos ponen fecha límite al coche de carburante y muchas ciudades restringen su acceso, la gasolina y, sobre todo, el diésel sigue subiendo en España. La electricidad también es cara, pero el coche eléctrico utiliza energía de forma mucho más eficiente:
- Motor eléctrico: 100 kilómetros requieren de 13 a 15kWh.
- Motor combustión: 100 kilómetros requieren de 40 a 45kWh.
Si comparamos, de forma aproximada, cuánto nos cuesta conducir 100 kilómetros en ambos tipos de vehículo:
- Coche eléctrico: 15kWh x 0,10€/kWh = 1,50€.
- Coche combustible: 5 litros (45kWh) x 1,35€/litros = 6,75€.
Para el cálculo anterior se ha tomado el precio con impuestos por kWh en horas valle y con una potencia contratada suficiente para carga lenta (3,7 kW).
¿Me conviene un coche eléctrico?
Si solo tenemos en cuenta los factores anteriores, movernos en coche eléctrico es cinco veces más barato. Sin embargo, hay otras consideraciones primordiales antes de sentarnos a conducir ahorrando en un coche eléctrico:
Autonomía: el principal escollo para migrar al coche eléctrico.
Cuidado porque los kilómetros de autonomía varían según el estándar. Siguiendo el más realista y actual, el WLTP, los vehículos pequeños tienen una autonomía media de 200-250 kilómetros. Aunque hay modelos que prometen alcanzar más de 400, sus elevados precios rompen cualquier estrategia de ahorro.
- Si solo utilizas el coche para moverte en ciudad, entonces hay margen de ahorro, incluso alquilando un coche de combustible para distancias más largas, como vacaciones y viajes a otras ciudades.
Ojo, porque en algunos modelos la batería es de alquiler (algo así como un renting), garantizando el reemplazo cuando pierde parte de su capacidad por su uso, lo que encarece unos 75-100 euros mensuales, según los kilómetros anuales estimados.
Recarga: muchas dudas y muchos euros.
Las electrolineras todavía no están suficientemente implantadas. En ellas se requieren tomas de carga rápida, pues no tiene sentido pasar varias horas esperando a que se recargue y además, que sean compatibles con los enchufes y estándares de las diferentes marcas.
- Solo si tienes un garaje con puesto de carga te puede salir barato cargar tu coche eléctrico. Las electrolineras cobran entre 0,35 y 0,50 euros por kWh. Con ese precio, se reduciría el ahorro respecto al coche gasolina o diésel.
Y la instalación en el garaje de casa no siempre es sencilla. Hay que llevar cables eléctricos desde el contador de cada vivienda hasta la plaza de aparcamiento, instalar un wallbox (puesto de carga), ampliar la potencia contratada (que también lleva un sobrecoste en la factura de la luz) si se quiere carga rápida (6,6kW a 7,2kW) o instalar un contador adicional solo para el wallbox.
En favor del ahorro: reparaciones, electricidad más barata y menos impuestos.
Que el coche sea un gadget conlleva un menor coste en reparaciones, pues muchas piezas del vehículo de combustible están ausentes en el eléctrico, como embrague y correas, etc. Y el mantenimiento también es más barato, al no requerir cambio de aceite, ni filtros. Los fabricantes estiman del 20 al 30% de ahorro en este sentido.
- La electricidad es más barata en horas valle, coincidiendo con las noches, cuando estamos en casa y tenemos el coche aparcado. Aquí sí hay margen de ahorro.
- El impuesto de circulación es más barato en algunas ciudades, hay peajes gratuitos y zonas de aparcamiento reservado para coches eléctricos.
Mucho más caros que el de combustible. ¡Atentos a las subvenciones!
El precio del coche eléctrico es entre 8.000 y 12.000 euros más caro que un modelo equivalente en gasolina o diésel. Este sobrecoste inicial representa el principal inconveniente para apostar por el coche eléctrico como herramienta de ahorro diario. En cualquier caso, en estos años de implantación, todo ahorrador debería esperarse a las subvenciones del Gobierno, el Plan VEA, con más de 50 millones de euros para coches eléctricos, en ayudas que alcanzan los 5.500 euros y otros 1.210 euros para la instalación del punto de carga.
¿Cuánto cuesta cargar un coche eléctrico?
Tras enumerar los gastos añadidos que supone comprar y cargar un coche eléctrico, podemos resumir que el precio de 100 kilómetros es más barato, con la tarifa valle apropiada, utilizando carga lenta durante la noche y con corriente del propio contador del domicilio.
Aunque aquellos que se han desconectado de la red de suministro eléctrico y disfrutan del autoconsumo de sus propios paneles solares fotovoltaicos, lo tienen más fácil para ahorrar con su coche eléctrico.
Pero además, hay que trasladar a ese precio por 100 kilómetros el sobrecoste de su compra y la instalación del puesto de carga, la batería en caso de ser alquilada y considerar las posibles fluctuaciones del precio de la electricidad. Mientras el Gobierno ofrezca ayudas, como el Plan VEA, hay que estar atentos, con el modelo ya elegido, para que no se escape la subvención.