La paridad del poder adquisitivo (PPA), también conocido por sus siglas en inglés PPP (purchasing power parity) es una herramienta para intentar establecer una comparación entre los distintos niveles de vida en diferentes países.
En la práctica, uno de los problemas con los que nos encontramos al intentar comparar la riqueza de los ciudadanos de diversos países es la cantidad de variables que dificultan el cálculo.
El PIB per cápita se suele utilizar para medir la riqueza de los ciudadanos de un país, pero esta medida es problemática ya que no tiene en cuenta la divisa ni la relación que existe entre los precios y el poder adquisitivo.
Por ejemplo, incluso dentro de un mismo espacio monetario como la zona euro, es posible que en Italia con un sueldo inferior un ciudadano pueda disponer de más bienes y servicios que otro ciudadano con un sueldo superior en Bélgica.
Cómo se mide
La forma que han encontrado los economistas para poder salvar todas estas complicaciones es elaborar una cesta de la compra representativa para poder contrastarla con la renta per cápita, teniendo también en cuenta la divisa.
Este procedimiento no está exento de problemas ya que hay que unificar un criterio de lo que constituye una cesta de la compra representativa. Tampoco es fácil tener en cuenta las diferencias en la calidad de los productos en los diferentes países.
No existe una homogeneidad a la hora de realizar los cálculos. El Banco Mundial en su web ofrece una base de datos muy completa.
Cómo tomar decisiones económicas basadas en PPA
Como todos los indicadores macroeconómicos, el PPA es un dato más que hay que interpretar dentro de un contexto. Una de las peocupaciones de los pequeños inversores es la de mantener el poder adquisitivo tras llegar a la jubilación. Algunos ciudadanos del norte de Europa al llegar a la jubilación buscan países con climas más amables y el PPA es un dato importante en su consideración a la hora de elegir una residencia donde puedan mantener su poder adquisitivo.
La inflación es uno de los enemigos conocidos de la conservación del patrimonio. Herramientas como los bonos ligados a la inflación se crearon para evitar la pérdida de poder adquisitivo. Sin embargo la complejidad de los sistemas económicos y su carácter global hacen que haya que tener en cuenta muchas variables. El coste de vida también es un factor muy importante a la hora de realizar nuestra planificación financiera y el PPA es una metodología que nos puede ayudar.